Los AMD Ryzen 8000G no han deshabilitado correctamente la función STAPM reduciendo su rendimiento con altas cargas

Ayer mismo ya estaban disponibles las nuevas APUs para equipos de escritorio Ryzen 8000G Series. Estos procesadores están basados en la versión de AMD para portátiles con gráficos RDNA 3, a los que se ha deshabilitado ciertas funciones que no tienen sentido en un PC de Sobremesa. Entre ellas se encuentra la función STAPM, una característica capaz de medir la temperatura de diferentes sensores situados en un portátil. Pero parece que a AMD se le ha olvidado deshabilitar esta función en los procesadores para equipos de escritorio Ryzen 8000G Series, provocando alguna pérdida de rendimiento cuando superan cierta temperatura.

La función STAPM es capaz de medir la temperatura de sensores situados en la superficie del portátil, así como los situados en el propio procesador. En un portátil, una temperatura elevada en alguno de estos sensores significaría tener que reducir la temperatura de la CPU, pero en un equipo de sobremesa es algo que no tiene sentido. Gamer Nexus ha comprobado que los Ryzen 8000G no han deshabilitado esta función correctamente afectando al rendimiento cuando la carga es elevada en la CPU y en la GPU integrada de estos procesadores.

AMD ha reconocido este problema y trabajará con los fabricantes de placas base para distribuir una actualización de UEFI para corregir este problema. Un problema que, según los datos recogidos por Gamer Nexus, puede repercutir en hasta un 16% en la caída de rendimiento según las pruebas realizadas entre un procesador Ryzen 8000G Series con STAPM activado y otro desactivado. Los usuarios que hayan comprado uno de estos procesadores deberán esperar una nueva actualización de la UEFI de su placa para corregir este problema.

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