ACER XB280HK 4K2K 28” GSYNC

Introducción

Un monitor gaming es algo más que un monitor GSYNC. De hecho el GSYNC no hace al monitor gaming sino más bien hace que cualquier monitor pueda tener unas prestaciones para juegos adecuadas sin defectos de imagen y mejorando la experiencia del jugador sea experto o esporádico. La tecnología GSYNC favorece no solo a monitores rápidos sino que también compensa los defectos de monitores con frecuencias de refresco más limitadas como son los actuales monitores 4k que podemos encontrar a precios razonables. Este es el caso del nuevo XB280HK de Acer. Un monitor 4k de precio razonable que además integra GSYNC.

GSync. Teoría

GSYNC permite borrar de un plumazo uno de los problemas de calidad visual que llevamos sufriendo los jugadores desde los inicios de los tiempos. Cuando nuestra tarjeta gráfica genera más “frames” o pantallazos por segundo de lo que soporta la frecuencia vertical de nuestra pantalla empezamos a detectar problemas como el “tearing” que podemos ver como descompensación entre lo que muestra la pantalla y el movimiento en ella y se traduce en un defecto importante de calidad de imagen que es más que evidente cuanto más sobrado va nuestro sistema en el juego que estemos ejecutando.

Para esto siempre ha habido una solución socorrida pero no perfecta llamado Vsync. Esto lo usamos todos y no es otra cosa que sincronizar la tasa de frames que genera nuestra tarjeta gráfica con la capacidad de frecuencia vertical de nuestro monitor. Esto, con la entrada de los LCD, hizo que las frecuencias máximas estuvieran clavadas en los 60Hz durante años aunque en los últimos tiempos hemos podido adquirir paneles más veloces capaces de alcanzar hasta 144Hz y por tanto acercándose más al potencial de los sistemas de mayores prestaciones y ofreciendo, a los jugadores, una plataforma más potente.

El problema del Vsync es que está pensado para cuando nuestro sistema va sobrado y por tanto siempre está por encima de ese límite que le marcamos. ¿Pero qué pasa cuando bajamos de tasa de “frames” y estos se reducen a 50, 40 o 120 cuando usamos un monitor de 144hz? Lo que ocurre es que se generan otros problemas tanto o más molestos que el “tearing” como el “input lag” donde la latencia entre nuestros comandos de teclado y ratón tarda algún tiempo en presentarse en pantalla.

Los monitores modernos, para jugadores, han mejorado muchos aspectos que van desde paneles más rápidos, técnicas como el ULMB (Ultra Low Motion Blur),…han conseguido reducir el “ghosting” y otros defectos de forma notable y sin duda, el acceso a los 120-144hz, ha permitido que los sistemas potentes encuentren en el Vsync una solución de prestaciones notables pero no definitiva ya que arrastra otros problemas como el “stuttering” que es cuando el sistema queda clavado esperando sincronía.

GSYNC se introduce como la solución que acaba con estos problemas. Tanto la falta de potencia de sistemas más ajustados para lograr frecuencias de FPS por encima de la frecuencia vertical del monitor, como los defectos derivados del Vsync. Para ello se introduce una electrónica dedicada en el monitor que hace que sea la salida de la GPU la que se ponga a cargo de la frecuencia de actualización vertical real del monitor dejando obsoletas (según la propia Nvidia) otras técnicas como el ULMB de los monitores más potentes y también haciendo inútil otras técnicas más de usuario como el overclocking del monitor. Todo solucionado de un plumazo pero quizás a un coste elevado y con algunas limitaciones que luego os mostraremos.

GSYNC permite que el monitor se adapte a la frecuencia de salida de la GPU. Es decir, que si nuestra GPU da 42FPS la frecuencia vertical del monitor se ajusta a esa frecuencia y por tanto elimina los problemas de adaptación del Vsync y en monitores rápidos, como el que os mostraremos hoy, se reduce de forma notable la latencia de entrada, se generan imágenes con menos fijación de pixel y por tanto imágenes más definidas y un juego con más respuesta a nuestros comandos.

GSYNC requiere hardware dedicado en el monitor, además de una gráfica por encima de la Geforce 650ti y drivers preparados. Todo juego es compatible mientras mantengamos el modo Gsync activado en el panel de Nvidia y este use un modo real a pantalla completa (Diablo 3, por ejemplo, no tiene este modo de pantalla completa). Las resoluciones soportadas por ahora son hasta 4k y también se soportan monitores múltiples aunque no modos 3D (al menos de momento).

 

El monitor. Panel

Aunque Acer estrene con este monitor su gama de productos XB lo cierto es que para mí ningún monitor actual con resolución 4x (3840x2160) es en realidad un monitor gaming. Su limitación a 60Hz, sobre Displayport 1.2, hace que este lejos de los monitores gaming más potentes. Aunque cierto es que ahora mismo sí que es una gran alternativa para el jugador que quiera incorporar las 4k a su método.

La pantalla tiene unas dimensiones de 28” de diagonal con la resolución ya mencionada de 3840x2160 puntos. Su conectividad se limita a Displayport, como todos los monitores GSYNC que van saliendo al mercado, y soporta esta resolución a una frecuencia vertical de 60Hz. Es compatible con la tecnología 3DVision de Nvidia pero con modo 3D limitado a 30Hz lo cual lo descarta como un monitor 3D de calidad para jugar pero si quizás para ver video. Sea como fuere no creo que nadie lo compre por su capacidad 3D sino por su buen equilibrio entre precio y resolución nativa.

El panel es de tipo TN, como todos los monitores 4k económicos que vemos en el mercado, con un tiempo de respuesta de pixel de tan solo 1ms. Esta generación de paneles TN no solo son rápidos sino que mejoran el contraste aunque los ángulos siguen siendo menos agraciados que en otros tipos de paneles y la diversidad de colores también es menor. Es algo que un jugador tiene que aceptar si quiere un monitor rápido de verdad y es también una realidad para cualquiera que quiera acceder a un monitor 4k de tamaño grande a precio razonable.

El Acer XB280HK cuenta con una peana profesional que le permite mucho movimiento y ángulos de posición así que podremos ajustarlo bien para que los ángulos menos agraciados de la tecnología TN no sean un problema tan fundamental. Este soporte integrado soporta giros sobre su propio eje, inclinación y pivotación para incluso trabajar en vertical.  Además estos monitores tienen un brillo elevado (300cd/m2), heredado de tecnologías como el ULMB (que precisamente juega con el brillo para mejorar y reducir el efecto blur) que aun soporta este monitor cuando no tenemos el modo GSYNC activado.

Algo muy agradable de este monitor es encontrar un Hub USB 3.0 con cuatro puertos de los cuales dos están en la parte inferior de la pantalla y otros dos en el lateral. Además uno de ellos admite carga extendida para dispositivos USB con consumos elevados con hasta 2.1A de potencia de carga. Eso nos permite organizar todo mucho mejor y además con velocidades elevadas como son las que entrega el USB 3.0.

La pena es que todos estos monitores tienen una gran limitación en cuanto a conectores de entrada se refiere y por tanto se limitan a dar servicio a un solo PC. Esto en mi caso sería inviable ya que un monitor con varias entradas se convierte en un centro de trabajo y entretenimiento importante.

 

El monitor. Gaming

Aparte del panel TN+Film de baja latencia la verdad es que este monitor no es tanto un monitor para jugadores como si un monitor profesional con una resolución sorprendente y un tamaño con el que trabajar es una gozada. Lo bueno es que además añade esas prestaciones especiales de monitor compatible con GSYNC y por tanto podemos jugar con una calidad excelente además de nuestras tareas o trabajos diarios.

Su peana pivotante nos puede invitar a usar varios de estos monitores en combinaciones múltiples ya que tiene mucha flexibilidad de posiciones y se adapta bien a cualquier posición y su anclaje VESA también nos pone fácil montarlo en otro tipo de soportes estándar que tengan fijación para VESA de 100mm.

El OSD del Acer XB280HK es de fácil acceso y control y de hecho no tiene muchas opciones realmente importantes que tocar aparte de la configuración de parámetros habitual en cualquier monitor. Si podemos jugar con dos elementos interesantes como el ULMB (cuando no tengamos activado GSYNC en el panel de control de la gráfica) y otra función interesante como es el OverDrive que podemos tener apagado, en normal, o en modo extremo. Esto acelera aún más la respuesta del pixel y elimina Blur y mejora el “input lag” pero es un modo solo recomendado para mientras jugamos y sinceramente con GSYNC tampoco lo veo de tanta necesidad. Sea como fuere está ahí para los usuarios acostumbrados a él o que vean mejora usándolo.

Echamos de menos algunas funciones extra que ahora encontramos en monitores para jugadores de marcas como ASUS o Viewsonic donde el OSD nos puede servir para disponer puntos de mira sobre la pantalla con independencia del juego que estemos usando. Detalles poco importantes pero que dan forma a un verdadero monitor para jugador.

 

G-Sync. Practica

El Acer XB280HK es un monitor que se comercializara en España alrededor de los 699 Euros. Su hermano pequeño el CB280HK, de la misma Acer, podemos encontrarlo por 399 Euros. Las diferencias son las que son, el GSYNC y todas las prestaciones gaming,  pero mantiene el mismo tipo de peana, diseño, y añade un puerto HDMI compatible con MHL. Aun así también pierde su Hub USB 3.0 tan útil. Son 300 Euros de diferencia por el mismo panel y algunas mejoras y también algunas pérdidas. Casi el doble de precio por el mismo tamaño de pantalla, resolución, etc. No quiero ponerme pesado pero 300 euros no son los 100 dólares que costaría de más la tecnología GSYNC. 

Cierto es, y ahora lo veréis en los videos que hemos grabado, que jugar a 4k con GSYNC es un espectáculo visual pero no sé hasta qué punto uno se atrevería a pagar este aumento notable del coste por disfruta de los juegos de esta forma. La diferencia es notable pero la diferencia de precio también lo es.

Prueba de GSYNC en la demo "Pendulum" de Nvidia. Permite probar varios modos con sincronía, sin y con GSYNC en FPS variables entre 40 y 60 FPS. Vídeo capturado a 1080p60. 

Vídeo de Gameplay de Battlefield 4 a 4k y calidad ultra con GSYNC activado. Vídeo capturado a 1080p60. 

Es la segunda vez que probamos GSYNC y la primera vez fue bastante espectacular. Juegos como Battlefield 4 pasan de ser espectaculares a ser visualmente perfectos y ya no es cuestión de gráficos sino que se consigue una inmersión superior para el jugador, se consigue más precisión en los movimientos y en general se disfruta más y mejor de lo que ocurre en la pantalla. Es una tecnología que revoluciona el jugar en el PC, más aun en una pantalla 4k, pero tiene un precio mucho más elevado del previsto.

Eso sí, en una pantalla 4k seguimos echando en falta algo de velocidad de refresco vertical aunque cierto es que a 4k es difícil ver un juego en calidad muy alta, al menos los más avanzados, por encima de los 60Hz incluso usando, como en nuestro caso, un potente motor gráfico como es la Geforce GTX 980.  

Me he permitido añadir un Gameplay con nuestro sistema y este monitor a 4k en Battlefield 4 en calidad ultra y capturado mediante Shadowplay de Nvidia. 

 

Análisis y conclusión

Un monitor con resolución 4k, o UltraHD si lo preferís, con la tecnología GYSNC suena muy atractivo. Si le sumamos un precio atractivo de menos de 700 Euros, que es menos que otras opciones GSYNC con resoluciones inferiores, tenemos como resultado un producto realmente atractivo para cierto tipo de usuario, sobre todo jugadores. El problema es cuando nos podemos a comparar opciones sin GSYNC y vemos las diferencias de precios y sin duda nos asaltan las dudas de si merece la pena esperar a ver como las opciones existentes bajan de precio o aparecen otras en el mercado.

Esto es una pregunta que debería responde cada uno. Lo que sí puedo decir yo es que el resultado de jugar en este monitor es espectacular y sin duda dan ganas de adoptar uno. La tecnología 4k añade una definición brutal a los juegos capaces de manejarla bien y un monitor GSYNC añade ese punto de calidad definitiva a un tipo de jugador que no le importa tanto las tasas altas de FPS sino disfrutar de una experiencia cinematográfica completa. Este monitor ofrece eso, si quieres o puedes pagarlo.