Arctic BioniX P120 A-RGB Review

La nueva generación de ventiladores BioniX de Arctic sorprenden por su diseño, que según sacamos de la caja ya nos deja bastante sorprendidos al no contar con ningún cable conectado a ellos y también por su peso extrañamente elevado para lo que viene a ser la media en ventiladores de este tamaño, 120mm de diámetro. Esto hace que nuestra review del Arctic BioniX P120 ARGB empiece con un aliciente especial.

Esta nueva generación de ventiladores continúa el diseño de las generaciones anteriores añadiendo capacidad A-RGB y además prestando novedades importantes en el modo en el que el ventilador se conecta con nuestro ordenador y como podemos conectar este ventilador con otros modelos idénticos en sistemas de refrigeración liquida o cajas de una forma mucho mas inteligente, con mucho menos cableado que gestionar.

 

 

 

 

 

 

El nuevo BioniX P120 A-RGB es un ventilador de caja también adecuado para sistemas de refrigeración liquida con 120mm de diámetro y un motor con rodamiento sumergido en fluido capaz de desarrollar velocidades de entre 400 y 2300rpm controladas por PWM.


No es habitual ver un ventilador sin ningún cable colgado.

Alcanza hasta 48CFM a su máxima velocidad de rotación con una presión estática de hasta 2.1mm/H2O que es una cifra elevada para un ventilador con este tamaño. La única pega es que a esta frecuencia genera hasta 45dBA de ruido. Por suerte su control PWM nos permite mantenerlo a frecuencias más bajas con un buen rendimiento.

Trabaja con un voltaje de 12v, como es lógico, y consume hasta 0.13 amperios de intensidad. Es algo mas ancho que la media, con 30mm de espesor, y pesa también algo mas de lo habitual, con 209 gramos. La conectividad, aunque luego hablaremos mas detalladamente de ello, es de tipo PWM para la potencia y A-RGB para la iluminación. Las conexiones son independientes así que la potencia de la iluminación no dependerá del funcionamiento del rotor principal.

La iluminación cuenta con 12 leds A-RGB situados en un marco cubierto con un material difusor de la luz que le permite ofrece una iluminación potente y bien distribuida por todo el marco de iluminación.

Una de las grandes mejoras de esta generación es la forma en la que Arctic ha gestionado la conectividad de los ventiladores. Cada uno de ellos tiene un conector idéntico de 8 pines, solo 7 en uso realmente, de entrada y salida en lados opuestos. En la entrada encontramos cableado adecuado para conectar a placa base y también encontraremos cableado para la conectividad entre ventiladores, de hecho, viene hasta un adaptador de conexión directa para cuando usemos dos o mas de estos ventiladores en sistemas de refrigeración como radiadores de 240, 360 o 480mm.

Con cada ventilador encontraremos también cableado adecuado para realizar conectividad única por ventilador, la tradicional, así como los acopladores cortos, cuando los dos ventiladores deben estar instalados uno pegado al otro, así como otro cable mas largo cuando necesitamos recorrer mas espacio entre ventilador y ventilador.

En cualquiera de los casos podremos conectar unos ventiladores a otros en cascada sin necesidad de mucho cableado recorriendo nuestra caja, la ventaja se traduce en que tendremos, en el peor de los casos, un solo cable entre ventiladores, y solo uno de ellos tendrá que estar conectado a la placa base. Lo único que deberemos tener cuidado es no sobrepasar la capacidad de carga del conector PWM de la placa base.

Se que esto no cambia mucho con respecto a la conectividad A-RGB, que siempre es en cascada, y que hay también adaptadores en “Y” para el conector PWM, y muchos ventiladores lo traen de serie, pero aquí todo estará concentrado en un único cable con un sistema de conexión que parece duro y resistente. Para mi es una mejora importante en el diseño de conectividad para ventiladores de ordenador.
A-RGB compatible con los mejores fabricantes

Aunque la conectividad de estos ventiladores es diferente a cualquier otro que haya pasado por nuestras manos, en el buen sentido, lo cierto es que su conectividad es completamente estándar y están preparados para funcionar con cualquier placa base con conectividad A-RGB que es casi cualquiera lanzada al mercado durante los dos últimos años.

El conector A-RGB es de tres cuatro pines, con control de polaridad en el tercer pin, el mismo formato que usan todos los fabricantes de placas base. Esto significa que podremos controlar la iluminación de estos ventiladores desde cualquiera de los programas de control de iluminación de los principales fabricantes de placas base sincronizando así toda la iluminación ARGB de nuestro sistema.

Tanto Asrock, ASUS, Gigabyte, MSI y otros usan este conector así que no encontraremos ningún problema en integrar este ventilador en nuestro ecosistema de iluminación actual.

 

El amplio rango de frecuencias con las que puede trabajar este ventilador le puede convertir tanto en un susurro como en una maquina infernal de ruido con hasta 45dBA de ruido según el propio fabricante. Personalmente siempre me gustan mas los ventiladores autolimitados a frecuencias cortas, pero también entiendo perfectamente a los usuarios que prefieren un rango amplio con el que no perder posibilidades de refrigeración cuando es necesario.

La ventaja de este modelo es precisamente esa, un rango amplio entre las 400 y 2300rpm con las que podemos jugar completamente. A 400rpm el ventilador se comporta con una eficiencia fantástica y un ruido muy bajo, inaudible montado en cualquier chasis.

 

El nuevo ventilador BioniX P120 A-RGB de Arctic ofrece un nuevo punto de vista en la conectividad de ventiladores, con una gestión mucho mas limpia e inteligente. No solo mejora la conectividad en paralelo, con contacto directo entre ventiladores, sino también cuando hay espacio entre ellos unificando en un único conector tanto la alimentación PWM como la conexión de tipo A-RGB estándar.


No solo es un portento a nivel de innovación, sino que también es un gran ventilador, con una mecánica excelente, un amplio rango de frecuencias, buen rendimiento y control de ruido siempre y cuando seamos capaces de regularlo en las frecuencias adecuadas para combinar buen desempeño con niveles de ruido controlados.