La Comisión Europea impone una multa de 111 millones de Euros a ASUS, Philips y otras compañías por fijar precios

No es, ni de lejos, la misma cantidad que ha tenido que pagar Google por abusar de su posición dominante pero sin duda la multa que la UE ha puesto a ASUS, Denon, Pioneer y Philips deja ver los esfuerzos de la institución por evitar que compañías hagan "trampas" a la hora de vender sus productos a costa de los consumidores.

La Comisión Europea ha multado a estas compañías con un total de 111 millones de Euros de los cuales 63,5 millones han tenido que ser abonados por ASUS, el conocido fabricante de hardware y componentes, 7,7 millones por Denon, 29,8 millones por Philips y 10 millones por Pioneer.

Las multas podrían haber alcanzado el doble de estas cantidades si no llega a ser por la colaboración de las empresas implicadas con las autoridades durante la investigación del caso.

La razón de estas sanciones no es otra que ciertas políticas de estas compañías a la hora de tratar con distribuidores y tiendas, obligando a los mismos a fijar unos precios marcados por los propios fabricantes. Estas políticas penalizaban cualquier oferta, promoción o rebaja en los precios bajo pena de denegar el acceso a nuevos productos o campañas y haciendo que, al final del día, los precios estuvieran fijados y los consumidores se vieran obligados a pagar más por ellos.

Las compañías multadas utilizaban herramientas avanzadas de monitorización para rastrear a un gran número de tiendas online que vendían sus productos y detectar así precios distintos a los fijados por ellas mismas. Aunque no monitorizaran a todas, una práctica habitual en las tiendas online de cierto tamaño es, también, la de monitorizar a otras tiendas para ofrecer precios similares, por lo que a efectos prácticos, las imposiciones de ASUS, Philips, Pioneer y Denon hacían que el mercado mantuviera unos precios fijos estancados sin ofertas ni variaciones.

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