Review ASUS Vivobook S15 con ScreenPad 2.0

Ya pudimos probar en su día el ScreenPad de ASUS en su portátil ZenBook Pro 15, este ingenio aprovechaba el espacio del trackpad para integrar una pantalla táctil capaz de funcionar como pantalla secundaria convencional o lanzador de Apps y complementos a distintos programas. En esta review del ASUS Vivobook S15 S532FA nos encontramos con el ScreenPad 2.0, la segunda versión de este trackpad vitaminado, ahora mucho más asequible al integrarse en modelos con precios más contenidos como el es caso.

El modelo concreto que analizamos hoy es el ASUS Vivobook S15 S532FA (90nb0mi2-m00690), es decir, el modelo con procesador Core i5-8265U, con 8 GB de RAM DDR4 a 2.400 GHz y 256 GB de SSD NVMe. 

Especificaciones técnicas del ASUS Vivobook S15 S532FA (90nb0mi2-m00690)

  • Procesador Intel Core i5-8265U, 4 Cores a 1,6 @ 3,9 GHz
  • Gráfica Integrada Intel UHD 620
  • 8 GB de RAM DDR4-2400
  • 256 GB SSD NVMe
  • Pantalla Nano Edge IPS de 15,6" Full HD
  • ScreenPad 2.0 
    • 5,65" FullHD+ (2.160 x 1.080 píxeles)
    • Super IPS
    • Multitáctil (4 dedos)
  • Teclado retroiluminado con 1,4mm de recorrido
  • Cámara con reconocimiento facial
  • 1 x USB-C 3.0
  • 1 x USB-A 3.0
  • 2 x USB-A 2.0
  • Salida HDMI
  • Lector microSD
  • WiFi 5 (802.11ac) + Bluetooth 4,2
  • Minijack 3,5mm para auriculares y micrófono
  • batería de 42 WH
  • 230,3 x 357,2 x 18 mm
  • 1,8 KG de peso
  • 899 euros
 

El ASUS Vivobook S15 S532FA es un portátil que podríamos clasificar dentro de la categoría de Ultrabooks asequibles, un equipo bastante fino y estilizado que, si bien no llega al peso o finura de los modelos más exclusivos del sector, se queda en 1,8 KG de peso y 1,8 cm de grosor.

La construcción de este equipo está basada en su mayor parte en plástico con un acabado bastante cuidado. El plástico permite reducir el peso y también es mucho más económico que utilizar aluminio o aleaciones presentes en gamas más altas.

La carcasa superior de este modelo tiene un acabado gris que se puede hacer pasar por aluminio sin muchos problemas y deja ver dos pequeños topes de goma en un borde que sirven para fijarlo a la mesa cuando lo abrimos ya que, como veremos más abajo, ASUS ha integrado su diseño "ErgoLift" para una posición de escritura más cómoda.

En el lado izquierdo tenemos únicamente dos puertos USB-A de tipo 2.0. Aún no siendo un equipo de gama alta, se agradecería prescindir ya de USB 2.0 e integrar USB 3.0 directamente como mínimo.

En el otro lado tenemos un lector de tarjetas micro SD, el puerto minijack combo para audio y micrófono, un USB-C de tipo 3.0 (3.1 gen1) y otro USB-A del mismo tipo. No hay USB 3.1 como tal (3.1 gen 2). La salida de vídeo consta de un HDMI, no hay displayport.

La parte trasera deja ver la ranura de ventilación por la que saldrá el aire caliente durante su uso, además, podemos ver como funciona el sistema ergo lift.

ErgoLift es la denominación de ASUS a ese mecanismo que eleva ligeramente la parte trasera del portátil al abrirlo, de esta manera, la pantalla del ASUS Vivobook S15 S532FA es la que sustenta el equipo al estar abierto, permitiendo mantener un perfil fino cuando está cerrado. Ad emás, facilita la ventilación al dejar más espacio entre la superficie de la mesa y las entradas de aire.

Los marcos de la pantalla de 15,6" son bastante contenidos, se trata de un diseño que hasta hace poco se reservaba a gamas superiores y que ahora ya está democratizado. Es cierto que los marcos no son tan finos como modelos que cuestan el doble o el triple, pero teniendo en cuenta que nos movemos por debajo de los 1000 euros, está bastante bien.

Estos marcos finos permiten que el portátil sea más compacto mientras mantiene la diagonal de 15,6".

Sin duda, a nivel de diseño interior, otro elemento que le da ese toque característico es la pantalla ScreenPad 2.0 situada en el trackpad,  más adelante hablaremos más en detalle de su funcionamiento.

La carcasa inferior es también de plástico y tiene cuatro topes de goma para evitar deslizamientos cuando está plegado, al abrir la pantalla, como hemos visto, el portátil se sustentará con otras dos pestañas de la pantalla.

Para acceder al interior hay que retirar los tornillos que están a la vista, 10 en total, y no todos son del mismo largo, los tres de la zona media tienen un largo superior. Además, cuenta con un sistema de pestañas internas que hace que retirar la tapa sea algo complicado.

En el interior podemos ver que el ASUS Vivobook S15 S532FA cuenta con un único slot SO-DIMM. En este caso viene con un módulo de 4 GB, estando los otros 4 GB soldados a la placa. 

Si nos fijamos bien, además del SSD M.2 que trae de serie, el ASUS Vivobook S15 S532FA tiene otro puerto M.2 libre, por lo que en principio es bastante sencillo ampliar el almacenamiento del equipo.

 

 

El teclado del ASUS Vivobook S15 S532FA es de tipo chiclet y cuenta con retroiluminación LED blanca configurable en 3 niveles de intensidad. No hay RGB (ni tendría mucho sentido en un equipo de este tipo), pero sí que se echa de menos algo más de transparencia en las teclas, ya que la iluminación LED queda bastante oculta.

Las teclas tienen un buen recorrido, 1,4 mm según especificaciones, y no le falta un pequeño teclado numérico en un lado que, aunque tiene un formato bastante más reducido de lo habitual, se agradece poder disponer de ese extra, al menos para los que lo solemos utilizar a menudo.ç

El resto de teclas tienen un buen tamaño y es cómodo escribir en él.

Sin embargo, el ScreenPad 2.0, con sus luces y sus sombras, es el que se llevará todo el protagonismo en esta sección.

Se trata de una pantalla de 5,65 pulgadas de panel multitáctil (4 puntos simultáneos) con resolución FullHD+ de 2160 x 1080 píxeles. Tenemos ahora más brillo, más resolución y más espacio que en la primera generación

Por defecto viene configurado con una resolución de 1000 x 500 y no los 2160 x 1080 máximos. La razón de esto es porque al ser una pantalla de tamaño bastante contenido, ciertas aplicaciones "nativas" para Screenpad se ven demasiado pequeñas, por ello, dependiendo del uso que le vayamos a dar será mejor escoger una menor resolución (controles, apps, etc), o la máxima (tener más elementos en pantalla)

Aquí podemos ver la diferencia: 

2160 x 1080:

1000 x 500:

Por defecto, el ScreenPad 2.0 incluye varias funciones de serie como un teclado numérico, escritura a mano, acceso rápido a teclas y combinaciones o complementos para ofimática.

Podemos tener un teclado numérico en el ScreenPad, aunque en el caso de este portátil ya tenemos uno físico más cómodo.

Distintas funciones se pueden aplicar directamente con un toque, combinando pulsaciones de teclado en botones personalizados a medida o entre los más utilizados.

Es posible añadir combinaciones manualmente o vincularlo a ciertas aplicaciones para poder utilizarlos conjuntamente.

El ScreenPad cuenta con un botón para abrir las aplicaciones recientes, como si estuviéramos ante un smartphone.

Es posible también añadir aplicaciones convencionales para inicio rápido, por ejemplo acceso directo a ciertas webs, navegadores o programas.

Incluso es posible utilizarlo como introducción manual escribiendo directamente. No nos hemos encontrado en ninguna situación donde esto fuera ma´s rápido que escribir con el teclado, pero la función ahí está.

Tenemos también su propia configuración para poder cambiar el brillo, modo de ahorro, resolución, tasa de HZ (50 o 60 Hz), etc.

Además de las propias apps y funciones, el ScreenPad 2.0 puede funcionar simplemente como una pantalla adicional, Windows la reconoce como pantalla colocada en la zona inferior y se pueden abrir aplicaciones y ventanas como si fuera una pantalla normal.

También se puede extender el escritorio y simplemente arrastrar ventanas para que parte se vea en ellas. Esta función no es demasiado util y posiblemente sea algo más práctico en modelos como el Zenbook Pro Duo con una pantalla secundaria mucho más grande y cercana a la principal. 

ASUS incluye una tienda con aplicaciones adicionales para el ScreenPad 2.0, por desgracia no hay demasiadas opciones, y ciertas aplicaciones no se ajustan de manera óptima. 

Además, tras la última actualización de Windows, el propio antivirus que ASUS incluye con el portátil bloquea el inicio de la aplicación dedicada a la gestión de funciones del ScreenPad. Eso, unido a que ASUS ahora utiliza aplicaciones de la tienda de Windows (que están ocultas a través del buscador de la propia tienda y a las que hay que acceder desde complicados enlaces en distintas webs de la compañía), hace que no sea tarea sencilla hacerlo funcionar correctamente ante cualquier problema.

Además, existe cierto lag o retardo a la hora de abrir aplicaciones para el ScreenPad, teniendo que esperar incluso algunos segundos para que se inicien.

Este ASUS Vivobook S15 S532FA incorpora una pantalla Full HD mate IPS de 1920 x 1080 píxeles. Es algo habitual en la mayoría de equipos en este rango de precios.

En nuestro laboratorio, hemos conseguido medir un brillo máximo de 285,81 cd/m² un valor algo insuficiente para entornos muy iluminados o al aire libre, pero que suele ser lo habitual también en el mercado.

A la hora de visualizar el negro, el brillo mínimo ha sido de 0.3102 cd/m², lo que significa que el ratio de contraste nativo es de 921:1, similar al de paneles IPS del mercado.

En las pruebas de panel, todas ellas bajo la gama DCI-P3,  el ASUS Vivobook S15 S532FA ha mostrado una buena calibración en la escala de grises, con valores verde y azul muy cercanos al 100% y el rojo algo por debajo del 90%.

La temperatura de color ronda los 7.100 K, unos valores bastante buenos.

En cuanto a la hora de representar colores, tenemos una desviación dE de 6,18 puntos de medio y una máxima de 9,49, no son los mejores valores que hemos visto en un portátil, pero para el rango de precios en el que nos movemos no están mal.

El ASUS Vivobook S15 S532FA es capaz de representar casi el 100% de la gama de color sRGB, con algunas limitaciones en la zona del verde/azul.

Al estar dotado de un procesador de bajo voltaje con gráfica integrada, esperábamos que el ASUS Vivobook S15 S532FA ofreciera una autonomía bastante llamativa, sin embargo, el uso de una batería de tan solo 42 Wh hace que los resultados en el test intensivo de batería, con pruebas multimedia, navegación, ofimática y 3D, no hayan sido especialmente destacables.

Hablamos de una duración de batería en el test de dos horas y 12 minutos, unos valores que lo sitúan en la mitad superior de la tabla pero que, teniendo  en cuenta que la mayoría de rivales integran procesadores de alto rendimiento, no son unos buenos resultados.

Por comparar, el propio Zenbook 15 de ASUS con una CPU Core i7-8565U más potente ofrece más del doble de autonomía gracias a una batería bastante mayor.

En un uso real con navegación, ofimática y algo de multimedia, el ASUS Vivobook S15 S532FA ofrece algo más de 5 horas si deshabilitamos el ScreenPad

El sistema de refrigeración de este equipo se basa únicamente en un heatpipe plano con un tamaño bastante generoso y un único ventilador. Dicho sistema, fabricado en cobre, es el encargado de refrigerar la CPU y la gráfica integrada.

En reposo o con poca carga no es un portátil ruidoso, pero cuando se le exige algo de potencia, es claramente audible su ventilador.

A nivel externo las temperaturas son bastante frescas y no es molesto utilizarlo incluso en tareas que requieren bastante rendimiento

A nivel interno, por lo general las temperaturas se mantienen bastante frescas, sin embargo, si realizamos tareas con un uso considerable de CPU y GPU de manera simultánea, podemos superar los 90 grados sin problemas. No obstante, no llega hasta el punto de que penalice al rendimiento.

El Intel Core i5-8265U es un procesador de bajo voltaje  dotado de 4 núcleos reales y 8 hilos de ejecución. Cuenta con 6 MB de caché L3 y una velocidad base de 1,6 GHz que amplía hasta los 3,9 GHz con Boost.

Este ASUS Vivobook S15 S532FA no cuenta con gráfica dedicada, por lo que es la Intel HD 620 integrada en el procesador la encargada de la aceleración gráfica, un modelo muy básico y limitado que no permitirá demasiadas florituras a nivel de juegos o rendimiento 3D.

El procesador tiene un TDP de 15W y su rendimiento en nuestros test de CPU lo colocan a la altura de Core i7-7700HQ, un procesador con un TDP de más del doble que pertenecía a la generación anterior, por lo que la mejora de rendimiento entre generaciones es bastante notable.

El procesadore gestiona sin problemas Windows 10 y todo tipo de programas, incluyendo aquellos pesados como Photoshop por ejemplo

La Intel HD 620 no es una gráfica pensada para jugar, aún así hemos pasado el test básico de 3DMark Firestrike para que nos podamos hacer una idea de donde queda respecto a gráficas dedicadas básicas.

La diferencia es notable e incluso modelos como la GTX 1050 Max-Q o la Radeon RX560  multiplican por 5 sus resultados.

 

 El SSD NVMe ofrece un rendimiento bastante notable, aunque alejado de los SSD más capaces en este formato.

Posiblemente, prescindir del ScreenPad 2.0 permitiría reducir el precio del equipo y lo haría más competitivo dentro del mercado. No obstante, ese mismo mercado está lleno de modelos con especificaciones similares y el ScreenPadr 2.0 hace que el ASUS Vivobook S15 S532FA tenga ese punto diferenciador que no tienen otros equipos.

Eso no quita que esta función no necesite una mayor optimización y, sobre todo, más aplicaciones y funciones para poder desbloquear todo su potencial pero, aún que solo se utilice en modo de pantalla adicional, es una manera bastante inteligente de aprovechar un espacio que tradicionalmente solo se utiliza como ratón táctil.

Además, esta segunda generación ofrece más brillo, más tamaño y más resolución, y todo ello integrado en un portátil mucho más asequible que los que tenían la primera generación de ScreenPad.

En cuanto al resto del portátil, si bien el procesador es más que suficiente para la gran mayoría de tareas que podemos exigirle, la falta de una gráfica dedicada hace que el aspecto multimedia esté algo cojo, y más si queremos echar alguna partida puntual.

Con una CPU de bajo voltaje, la ausencia de gráfica dedicada se entiende perfectamente en portátiles que priorizan una alta autonomía, sin embargo, los 42 WH del Vivobook S15 no son suficientes para que sea un equipo que destaque en ese aspecto.

 

Más allá de las mejoras en formato que introduce el Screenpad 2.0 respecto de la anterior generación, el Vivobook S15 nos permite aprovechar al máximo el espacio del trackpad, ya sea como pantalla adicional o como lanzador de aplicaciones y funciones extra. Todo ello en un equipo con un tamaño contenido, un precio por debajo de los 900 Euros y unas opciones de expansión bastante interesantes.