Trump vuelve a cargar contra China con una nueva subida de impuestos arancelarios del 10% en productos tecnológicos
Si creíamos que con la retirada del veto de los Estados Unidos a Huawei se habían calmado las aguas no podíamos estar más equivocados, Trump va a volver a subir los impuestos arancelarios a China en un 10% sobre los 300 mil millones de Dólares de valor de bienes y productos restantes a partir del 1 de septiembre de 2019.
La medida no afectará sobre los productos que ya tienen el 25% de subida arancelaria, pero si lo hará sobre los bienes y productos restantes valorados en 300 mil millones de Dólares, entre los que se encuentran una gran cantidad de productos tecnológicos tales como smartphones, ordenadores portátiles y consolas.
Apple por ejemplo es una de las perjudicadas, ya que, aunque el diseño de los iPhone se realiza en los Estados Unidos (Apple es una empresa estadounidense), el ensamblaje de los terminales se realiza en fábricas en China, y a efectos prácticos el desembarco de sus productos en tierras americanas no deja de ser una exportación, y, como tal, está sujeta al impuesto arancelario.
Ya anunciamos en su momento que Apple junto con otras empresas estaban comenzando a trasladar las fábricas de producción fuera de China, tras la subida previa del 25% de impuestos entre otros motivos. Pero Apple no será la única, cualquier smartphone que provenga de China y esté dentro los 300 mil millones en mercancías restantes se verá afectado, Huawei, Xiaomi, Sony y muchas otras empresas se verán afectadas con esta subida.
A pesar de lo que mucha gente pueda pensar, China no paga la subida de impuestos, aunque puede obviamente ver indirectamente mermada su capacidad de venta debido a la subida, la subida relativa de los impuestos los paga el consumidor final, o en el caso de algunas empresas como Apple, los asume el fabricante como ya sucedió tras la primera subida, ahora está por ver si seguirán asumiendo la nueva subida o repercutirá en el consumidor final.
El motivo de este movimiento no es otro sino la supuesta rotura de acuerdo que tenía China de comprar a Estados Unidos diversos productos agrícolas, además de que tampoco cumplió la promesa de no seguir vendiendo fentanilo en los Estados Unidos, en una serie de Tweets, el presidente Trump se justificó ante la inminente subida.
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