Volkswagen, Mercedes y BMW afirman que la escasez de chips continuará hasta 2023
Si bien la industria informática está sufriendo una buena parte de los “destrozos” causados por la escasez de chips que sufre el mundo desde el inicio de la pandemia del coronavirus, otro de los sectores que está viendo como el mercado se desintegra ante sus ojos es el automotriz, un mercado que confía en la industria de semiconductores para dar vida a millones y millones de vehículos al año.
Según podemos leer en Automotive News en una noticia que se encuentra tras una barrera de pago, el Salón del Automovil de Munich ha sido una oportunidad para poder conocer las opiniones de algunos fabricantes de automóviles, y en este caso, Ola Kallenius, CEO de Daimler, declara que algunos proveedores aseguran tener problemas para cumplir con la demanda de semiconductores, una situación que solo se relajaría de cara a 2023.
Por otra parte, Oliver Zipse, CEO de BMW, lanza una declaración similar, donde la tensión de las cadenas de suministro de chips continuará en los próximos 12 meses, algo que nos lleva a finales de 2022, mientras que Herbert Diess, de Volkswagen, cree que este cuello de botella puede durar “años”.
Sin duda, en la industria automotriz parecen ver un panorama bastante más crudo de lo que se preveía en un principio, donde 2022 sería el año en que la situación volvería a la normalidad, al menos en mayor medida.
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