La nueva generación de Kindle Scribe incorpora escritura a color, chip de cuatro núcleos y búsqueda de notas con IA

La nueva familia Kindle Scribe de Amazon no es un simple repaso estético: es un replanteamiento del papel digital para trabajo concentrado. El cuerpo ultrafino de 5,4 mm y los 400 gramos reducen la fatiga al sostenerlo y, sobre todo, facilitan llevarlo a reuniones o a clase sin añadir volumen a la mochila.

La pantalla de 11 pulgadas antirreflejos adopta proporciones de hoja estándar, de modo que un contrato, una presentación o un capítulo técnico caben de forma natural. El cambio importante está bajo la superficie. El vidrio con textura aporta una fricción controlada que recuerda al grano de un papel de gramaje medio: la punta muerde lo justo, evitando resbalones y mejorando el control en trazos largos o diagramas.

La reducción de la latencia se percibe en gestos cotidianos como subrayar o arrastrar una flecha; la tinta aparece donde debe, cuando debe, y esa correspondencia directa acorta la curva de aprendizaje para quienes vienen del cuaderno físico.

Un salto en iluminación y visualización

El sistema de luz frontal adopta LED miniaturizados montados al ras de la superficie, lo que permite biseles más delgados y una iluminación homogénea de esquina a esquina. La pila de pantalla rediseñada también reduce el paralaje hasta hacerlo imperceptible: al apoyar el lápiz, la tinta digital parece aflorar en el punto de contacto, lo que mejora precisión y confianza al trazar.

El nuevo chip de cuatro núcleos y la tecnología de pantalla Oxide añaden velocidad sostenida para pasar páginas y escribir sin interrupciones. Ese reparto fino de la luz reduce puntos calientes y artefactos, y permite sesiones nocturnas con menos fatiga ocular.

En oficinas iluminadas con tubos o focos duros, la difusidad de la guía evita reflejos puntuales que te obliguen a buscar ángulos raros. El resultado práctico es que tanto leer como escribir se sienten constantes a lo largo del día, sin ajustes de brillo continuos ni cambios de postura.

Kindle Scribe también llega en color

Kindle Scribe Colorsoft añade color sin renunciar a las virtudes del papel electrónico. La clave está en una guía de luz con LED de nitruro y un filtro cromático propio que evita los tonos lavados habituales y mantiene buen contraste en texto.

El motor de renderizado a color reordena el pipeline para que el trazo siga la mano sin latencia perceptible incluso al superponer capas y opacidades. La batería conserva semanas de uso y la interfaz se mantiene sobria para proteger la concentración.

El color abre rutinas que antes resultaban poco naturales en tinta monocroma: codificar tareas por prioridad, diferenciar capas en mapas mentales, resaltar advertencias en un briefing o revisar gráficos sin perder acento cromático.

Un cuaderno digital con IA

El foco productivo se refuerza con un cuaderno potenciado por IA que ordena y acelera la captura. La nueva Pantalla de Inicio incorpora Notas Rápidas para atrapar ideas al vuelo sin crear cuadernos desde cero. La compatibilidad con Google Drive y Microsoft OneDrive simplifica el ida y vuelta de archivos: se importa para anotar, se exporta con las marcas incrustadas en PDF y se conserva histórico.

La búsqueda con inteligencia artificial entiende lenguaje natural, encuentra fragmentos relevantes y devuelve resúmenes que condensan páginas de apuntes, con la posibilidad de profundizar mediante preguntas encadenadas cuando el tema lo exige.

La lectura también se beneficia de funciones discretas y útiles que respetan la obra. Story So Far genera una puesta al día hasta el punto donde quedó la lectura. Ask this Book permite seleccionar un pasaje y preguntar por motivaciones, símbolos o contexto. Estas funciones llegarán inicialmente a miles de títulos en Estados Unidos, con estreno primero en la app de iOS y, más adelante, en los dispositivos Kindle.

Un ecosistema cuidado

Todos los modelos incluyen un nuevo lápiz que no necesita carga y se acopla magnéticamente al borde, de forma que siempre está a mano y difícilmente se pierde. Amazon acompaña con fundas tipo folio en cuero vegetal y un folio ejecutivo con cierre limpio pensado para bolsos o maletines.

También entra Alexa+: enviar notas y documentos desde el Scribe a la asistente permitirá, según el plan de Amazon, conversar sobre ideas, crear recordatorios o preparar una lista de tareas basada en tus apuntes. Además, la paleta incluye diez colores de lápiz y cinco de resaltador, y una herramienta de sombreado que genera degradados suaves para dar profundidad sin perder legibilidad.

Precios y disponibilidad

La línea se desplegará por fases con varios modelos. A finales de año, en Estados Unidos, Kindle Scribe con luz frontal parte de 499,99 dólares (unos 426 euros) y Kindle Scribe Colorsoft desde 629,99 dólares (536 euros aproximadamente); el modelo sin luz frontal llegará a comienzos del próximo año por 429,99 dólares (unos 366 euros). La disponibilidad internacional dependerá del calendario local y de acuerdos de distribución, pero la intención es que la familia Scribe esté presente como apuesta de productividad silenciosa durante 2025.

El conjunto deja una idea clara: Kindle Scribe no intenta convertirse en una tableta más, sino en una herramienta de enfoque. El color suave del modelo Colorsoft y el motor de trazo afinado pulen lo expresivo; y el cuaderno con IA, la búsqueda semántica, el envío a servicios y la organización por carpetas atienden lo práctico. Si el valor histórico de Kindle fue leer sin ruido, esta generación traslada ese principio a la escritura y a la organización personal: menos fricción, más intención.

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