Jolla Phone y Sailfish OS 5: el regreso del móvil europeo Linux con interruptor físico de privacidad

Tras un largo periodo de silencio en el mercado de hardware, la compañía finlandesa Jolla ha regresado a la escena tecnológica con una propuesta que busca diferenciarse radicalmente de los gigantes del sector. Su nuevo dispositivo, bautizado simplemente como Jolla Phone, se presenta como una alternativa europea que pone el control absoluto en manos del usuario, alejándose del duopolio de Android e iOS mediante un sistema operativo propio y soluciones de hardware dedicadas a la seguridad.

La característica más llamativa de este terminal es, sin duda, su enfoque inflexible hacia la privacidad. En un lateral del chasis, el dispositivo integra un interruptor de privacidad físico. A diferencia de los controles por software, que pueden ser vulnerados, este mecanismo permite cortar la corriente o desactivar a nivel de hardware componentes críticos como el micrófono, las cámaras o la conexión Bluetooth. Además, es configurable por el usuario, quien puede decidir qué sensores o funciones (incluida la compatibilidad con apps de Android) se apagan al accionar la palanca, garantizando que el teléfono deje de escuchar o transmitir datos al instante.

Sailfish OS 5 es el Linux real que hay bajo el capó

El alma del Jolla Phone es Sailfish OS 5, la última versión de su sistema operativo basado en Linux. La compañía hace hincapié en que no se trata de una versión modificada de Android, sino de un Linux real. Este sistema promete una experiencia libre de rastreo, sin envío de datos ocultos a servidores externos ni analíticas forzadas.

No obstante, Jolla es consciente de la necesidad de aplicaciones en el día a día. Por ello, el sistema incluye una capa de compatibilidad que permite ejecutar aplicaciones de Android. La gran diferencia reside en que esta función es totalmente opcional. Así, el usuario puede optar por desgooglificar su teléfono por completo, utilizando solo aplicaciones nativas o desactivando el subsistema de Android cuando no lo necesite.

A nivel técnico, monta una pantalla AMOLED de 6,36 pulgadas con resolución FullHD y protección Gorilla Glass. En su interior, alberga un procesador MediaTek de alto rendimiento (cuya referencia exacta aún no se ha especificado), acompañado de 12 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento interno, ampliables mediante tarjeta microSD.

El apartado fotográfico consta de una cámara principal de 50 MP y un gran angular de 13 MP. Siguiendo con la filosofía de sostenibilidad y reparación, el terminal recupera una característica casi extinta. Nos referimos a una batería de 5.500 mAh reemplazable por el usuario, al igual que su tapa trasera, disponible en colores inspirados en la naturaleza nórdica. La producción del dispositivo ya ha sido confirmada tras superar con creces su objetivo de reservas, con una fecha de entrega estimada para la primera mitad de 2026 y un precio de venta final que rondará los 599 euros.

Fin del Artículo. ¡Cuéntanos algo en los Comentarios!