La RIAA desvela sus métodos de investigación

La industria de grabación musical proporcionó el pasado miércoles los detalles de las técnicas de investigación que han llevado a cabo hasta el momento por parar la piratería musical a través de Internet.

El motivo de esta revelación fue debido a la intención de identificar a una mujer de Brooklyn que, según la APA, compartía unas 1.000 canciones en Internet. A pesar de las insistencias de dicha mujer por asegurar que los temas musicales eran de discos que había comprado legalmente, la industria discográfica cuestiona este argumento.

Utilizando un procedimiento bastante sofisticado, la Asociación Estadounidense de la Industria de la Grabación (RIAA) examinó los archivos musicales de la computadora de la mujer y rastreó su huella digital hasta los antiguos servidores de Naptser, que cerraron en el año 2001.

La RIAA comparaba a esta mujer con una ladrona, diciéndole al juez que la mujer no era una transgresora inocente o accidental y catalogando los alegatos de su abogado como terriblemente engañosos.

Por su parte, el abogado de la mujer aseguró que el último argumento de la industria musical era “simplemente una cortina de humo para desviar la atención del asunto relacionado con si su proveedor de Internet, Versión Internet Services Inc., debe revelar su identidad bajo una citación por derechos de autor”.

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