Los próximos procesadores de gama alta, el Snapdragon 8 Elite Gen 2 y el MediaTeck Dimensity 9500, no registrarían un aumento relevante de precio respecto a sus generaciones anteriores, según una filtración reciente. Ambos chips, fabricados por TSMC (aunque podría entrar en la ecuación Samsung), emplearían la versión mejorada del nodo de 3 nanómetros, conocido como N3P, que ofrece mejoras en eficiencia energética y rendimiento frente al anterior N3E.
Aunque las nuevas tecnologías suelen implicar mayores costes de producción, curiosamente este no sería el caso de estos SoC, lo que permitiría a los fabricantes de smartphones mantener márgenes de beneficio estables en sus modelos de gama alta y gama alta premium.
La subida de precios podría venir por la memoria RAM, no por el chip
Según hemos podido conocer, el aumento de precios podría llegar desde otro componente clave: la memoria LPDDR5X, que se espera que suba aproximadamente un 5 %. Esta subida podría trasladarse al precio final de los terminales, ya que la memoria representa una parte importante del coste en dispositivos de gama alta.
Algunos fabricantes chinos planean mantener sus buques insignia en una franja de entre 3.999 RMB y 4.499 RMB (alrededor de 478 a 530 euros), similar al precio base del Xiaomi 15, que ya incorpora el Snapdragon 8 Elite. Esto sugiere que el precio del procesador no será un factor determinante en el aumento de costes de esta nueva generación.
Por el contrario, si el encarecimiento de la memoria se mantiene y la demanda no disminuye, será ese componente el que marque el compás en los precios de los smartphones de próxima generación. Hay que recordar que durante 2026 se espera que comience una transición hacia las memorias LPDDR6, que serán más rápidas y eficientes. Este es un hecho que podría modificar nuevamente el equilibrio de precios y especificaciones.
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