WhatsApp para Windows tenía una app nativa excelente. Meta la ha sustituido por una webapp que consume hasta 1,2GB de RAM

Casi en paralelo al lanzamiento de su app nativa para el Apple Watch, Meta ha comenzado el despliegue de una actualización para WhatsApp en Windows 11 que, lejos de ser una mejora, supone un notable paso atrás en rendimiento. La compañía está reemplazando su aplicación nativa (UWP/WinUI), conocida por su eficiencia y bajo consumo de recursos, por un contenedor WebView2. En esencia, la nueva aplicación es un simple acceso directo a la versión web de WhatsApp.

La nueva versión, identificada como 2.2584.3.0, está llegando a los usuarios a través de la Microsoft Store. Este movimiento confirma los planes de la compañía para unificar su base de código, but a costa de la experiencia en escritorio. Como se había confirmado recientemente, el despliegue ya ha comenzado, obligando a los usuarios a migrar a esta versión web encapsulada.

Un claro paso atrás por parte de Meta

El principal problema de esta nueva arquitectura es el impacto directo en los recursos del sistema, especialmente en la memoria RAM. Según las pruebas realizadas por el medio especializado Windows Latest, las diferencias entre la aplicación nativa y la nueva versión web son drásticas.

La aplicación nativa UWP consumía apenas 18MB de RAM en la pantalla de inicio y se mantenía estable en unos 190MB durante un uso normal. Por el contrario, la nueva aplicación WebView2 necesita hasta 300MB solo para mostrar la pantalla de inicio de sesión, estando inactiva.

La situación empeora significativamente tras iniciar sesión. Las mediciones indican que la nueva versión de WhatsApp consume 1,2GB de RAM de media mientras se ejecuta en segundo plano sin actividad. Durante las pruebas, esta cifra llegó a picos de 2GB, y podría alcanzar los 3GB en conversaciones muy activas. En comparación, la versión nativa rara vez superaba los 300 MB incluso bajo carga intensa.

Este elevado consumo de memoria no es el único inconveniente. Los usuarios han reportado que la aplicación se percibe más lenta, con mayores tiempos de carga al navegar entre chats. Además, la integración con el sistema operativo de Microsoft es ahora deficiente.

Se han detectado problemas con las notificaciones de Windows, que en ocasiones se retrasan, y la aplicación parece tener dificultades para respetar correctamente los modos de No molestar o las horas activas configuradas en Windows 11. Aunque algunos usuarios intenten evitar la actualización, se informa que Meta forzará el cierre de sesión en la app nativa para obligar a todos los usuarios a adoptar la nueva versión web.

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