Introducción y Especificaciones Técnicas de la Fractal Design Mood
Aquí tenemos la Review de la Fractal Design Mood, una caja compacta para placas Mini-ITX que llama la atención por un diseño muy vertical y el uso de materiales como la tela en gran parte de la zona exterior. Es un diseño llamativo pero elegante, que no desentonará en ningún escritorio, ni tampoco en una oficina o en el salón como centro multimedia u ordenador multipropósito.
Esta disposición vertical permite la integración de tarjetas gráficas de hasta 325 mm de largo e incluso hay opción a colocar radiadores de refrigeración líquida de 280 mm. El formato nos recuerda ligeramente a propuestas de PCs como el Corsair One o aquel Mac Pro del 2013 con diseño tubular alargado, aunque en este caso tenemos una sección más cuadrada.
Un gran ventilador de 180 mm situado en la parte superior ayuda al propio efecto de la convección para extraer el aire, al mismo tiempo que su carcasa de tela permite la entrada de aire directamente al sistema o a los dos ventiladores que se pueden colorar en un lateral.
Veamos qué nos ofrece y cómo es el proceso de montar un PC completo en esta Fractal Design Mood.
Características Técnicas de la Fractal Design Mood
- Materiales: Acero, plástico y Tela.
- Placas Base: Mini-ITX.
- Fuentes de Alimentación: SFX y SFX-L.
- Tarjetas gráficas:
- Max: 325 x 56 x 145 mm. Doble Slot.
- Disipadores CPU: 110 mm en modo torre, 77 mm en modo perfil bajo.
- Almacenamiento:
- 2 x 2,5" para SSD/HDD.
- 1 x 3,5" para HDD.
- Conectividad Frontal:
- 2 x USB-A 3.0 5 Gbps.
- 1 x USB-C 3.2 Gen 2x2 20 Gbps.
- 1 x Minijack 3,5 mm combo audio+mic.
- Soporte ventiladores:
- Zona Superior: 1 x 180 mm (Incluido).
- Lateral: 2 x 140mm o 2 x 120 mm.
- Filtro de Polvo: 1.
- Soporte Radiadores Refrigeración Líquida:
- Lateral 1 x 120 / 140 / 240 / 280 mm.
- Dimensiones (ancho, largo, alto): 212 x 212 x 453 mm.
- Peso: 4,6 kg.
- Precio: 169,99 euros.
Diseño y Conectividad
La Fractal Desgin Mood está disponible en dos versiones diferenciada por el color. Una tiene un acabado gris tirando hacia el blanco, y otra está basada en una carcasa negra con una tela más gris ostura. Este último modelo es el que hemos analizado.
Externamente, llama la atención tanto su formato como el acabado. La tela le da un toque, sin duda, distintivo dentro del mercado de cajas y la acerca más a ser un accesorio o mueble de salón que a una torre de PC típica.
Tanto la tapa superior como la zona inferior de la peana están recubiertas de plástico en color negro, el acabado es bueno pero no puede disimularse que se trata de plástico, quizás aquí un recubrimiento de aluminio hubiera ayudado a ofrecer un toque más premium. A fin de cuentas, estamos hablando de una caja Mini-ITX que cuesta 169,99 euros.
En la parte trasera tenemos una zona con un panel con rejilla y filtro de polvo. Este panel se puede retirar fácilmente tirando desde abajo para luego, tornillos mediante, poder retirar también el resto de la estructura exterior forrada en tela.
La Fractal Mood se sostiene por cuatro peanas de goma que se encuentran en la parte inferior. Dicha peana tiene uno de los lados abierto, de tal forma que se pueden sacar los cables de alimentación, de la gráfica y los que vayan conectados a la placa base por la parte inferior. Si nos fijamos, podemos ver que la orientación de los componentes está localizada hacia abajo, por lo que la conectividad trasera no será lo más accesible del mundo. Eso sí, tendremos todos los cables saliendo por la parte baja trasera, dejando un escritorio, o lugar donde esté el PC, mucho más limpio y ordenado.
Un sistema de dos slots de expansión permite la incorporación de tarjetas gráficas de hasta dos slots, mientras que su diseño vertical permite longitudes de hasta 32,5 cm .
Lo más sencillo, como ocurre en la mayoría de cajas, es utilizar los puertos frontales para las tareas puntuales, y aquí la Fractal Mood nos deja un conector minijack combinado de 3,5mm para audio y micrófono, dos USB-A 3.0 de 5 Gbps y un USB-C con USB 3.2 gen 2x2 de 20 Gbps, una opción muy interesante si tenemos una placa compatible que nos ofrece un ancho de banda más que decente.
En el centro tenemos un botón de encendido con LED blanco, el único detalle de iluminación que veremos en esta caja, más allá de RGB que podamos tener en componentes internos.
Internamente, la Mood tiene una estructura bastante sencilla, con cuatro pilares que sustentan la torre, el gran ventilador de 180 mm en la zona supeior, y distintas bandejas para la colocación de la fuente SFX/SFX-L, la placa base y la tarjeta gráfica.
Un detalle interesante y muy importante es que se incluye en Riser PCI Express x16 ya de serie.
Capacidades de Refrigeración de la Fractal Design Mood
El aire caliente tiende a subir hacia arriba desplazando al aire frío, esa es una de las principales razones por las que, por lo general, se suelen montar los ventiladores de una caja de tal manera que el aire frío entre por la parte baja o media y salga por la parte superior.
En este caso, teniendo una torre completamente vertical, la elección es obvia, y la propia Fractal ha integrado un ventilador de 180 mm en la parte superior que se encarga de ayudar al propio efecto de convección del aire. Con un único ventilador se puede refrigerar sin problemas la torre, aunque hay espacio para dos más en un lateral.
El ventilador superior es el Fractal Design Dynamic x2 GP-18 PWM, un modelo preparado para durar 90.000 horas, con un rango de rotación que va desde las 300 RPM hasta las 1.200 RPM y que permite mantener un flujo constante generoso con un nivel de ruido contenido.
El flujo máximo que genera gracias a su tamaño es de 153,7 CFM con una presión estática de 2,26 mmH2O con un nivel sonoro de entre 16 y 35,4 dB(A). A máxima velocidad es claramente audible, pero no llega a ser molesto y si creamos una curva de velocidad bien ajustada podremos tener buena refrigeración con un funcionamiento silencioso.
Internamente, además de los ventiladores que pueda tener la propia gráfica o el disipador de CPU, tenemos espacio para dos ventiladores más de 120 mm o de 140 mm en un marco específico para ellos. Estos ventiladores empujarán aire directamente a los componentes.
A pesar de su pequeño tamaño, la Fractal Mood también tiene espacio para radiadores dobles de RL, por lo que podemos colocar modelos de 120, 140, 240 y hasta 280 mm en el lateral, en vez de los dos ventiladores mencionados. En este caso, los ventiladores se colocan pegados al radiador por la zona interior.
Un detalle a tener en cuenta es el de la tarjeta gráfica, a la hora de captar aire no tendremos problema porque hay entrada directa y se puede mejorar con ventiladores. Sin embargo, a la hora de expulsar el aire caliente, si tenemos una gráfica con expulsión de aire en la propia caja podremos sacar el aire caliente por encima, sin embargo, si tenemos una gráfica con disipador de turbina, el aire tendrá que ir de arriba abajo hacia la parte inferior.
Aunque queda un buen espacio entre la mesa y la salida de aire de ese tipo de gráficas, lo cierto es que es un punto donde se puede acumular el calor fácilmente, y lo haría siguiendo un flujo opuesto al del resto de la torre.
Montaje y Opciones de Almacenamiento
Fractal incluye unas instrucciones muy detalladas de las distintas configuraciones posibles, dependiendo de si tenemos un disipador de CPU de perfil bajo, de torre, o un sistema de refrigeración líquida. Incluso hay consejos sobre cómo colocar los cables.
El montaje no es excesivamente complicado, pero sí que es más complejo y laborioso que el que tendría una torre más grande o en formato más convencional, ya que hay que tener en cuenta el espacio disponible y organizar un poco previamente donde irá cada cosa, ya que si colocamos, por ejemplo, un cable de alimentación específico antes que algún componente clave, posiblemente tengamos que volver atrás.
En cualquier caso, hay que reconocer que la principal prioridad a la hora de montar un PC en esta caja es intentar que quede limpio para dejar que el paso del aire sea lo más fluido posible, pero no nos tenemos que preocupar por la parte estética gracias a un diseño que no deja ver el interior.
El montaje comienza retirando la tapa trasera, simplemente tirando, para poder acceder a dos tornillos que nos permite retirar la carcasa cubierta de tela. Aquí se ha perdido una magnífica oportunidad para tener una caja que se pueda montar o acceder al interior sin herramientas.
Ahora solo queda tirar de la carcasa para dejar la estructura interna al desnudo.
Lo primero será retirar la zona frontal, un panel dedicado a dos ventiladores y a la caja de los discos duros, se retira, de nuevo, quitando dos tornillos y liberando este panel. Se puede retirar también el de los discos duros para facilitar la colocación después.
Ahora solo tenemos que colocar la placa base y la fuente de alimentación. La Placa va colocada con los puertos hacia abajo, se fija mediante cuatro tornillos y deberemos (si vamos a usarlo) conectar ya el riser PCI Express X16. El espacio está calculado al milímetro, por lo que apenas tendremos margen para moverlo demasiado.
Por otro lado, la fuente de alimentación, SFX en este caso, se coloca en el espacio que queda encima de la placa, con el conector de corriente hacia un lateral. Gracias a un alargador, se conecta a la toma y tenemos otra salida en la zona inferior para unificar conectores.
El riser que conectamos previamente va a dar a la parte trasera, donde la tarjeta gráfica se coloca boca abajo, con los puertos también hacia la zona inferior y fijada a los dos slots PCI. El puerto PCIe, riser mediante, está situado en la parte derecha. Es posible retirar una de las columnas principales de la caja para facilitar el montaje, pero si la tarjeta gráfica no es demasiado grande no habrá problema.
Para el disco duro, si es que queremos ponerlo hoy en día. Tenemos una bahía de 3,5" que se fija en la bandeja frontal. Esta bandeja es donde se podrían colocar dos ventiladores o un radiador de RL, por lo que si vamos a querer colocarlos, mejor nos olvidamos del disco duro.
El módulo tiene 4 puntos de anclaje con gomas anti vibración y se engancha a la bandeja.
En el lateral derecho podemos colocar una bandeja para un disco duro o SSD de 2,5 pulgadas, se fija entre la columna y la bandeja sobre la que se sujeta la fuente. Además de este hueco, hay otro que podemos colocar bajo el ventilador de 180 mm, pero ya requiere desmontarlo y, además, también interfiere con el flujo de aire.
Una vez todo está conectado, solo queda volver a poner la carcasa y la tapa trasera. Lo más sencillo de acceder es, precisamente, a la zona de la tarjeta gráfica, por lo que este será el componente más fácil de cambiar en caso de ser necesario.
Una vez todo cerrado, los cables quedan por debajo, por lo que el acceso a los puertos es bastante complicado y es mejor dejarlo ya hecho antes de encender el PC.
Análisis y Conclusión
Un diseño original, con la tela como protagonista, y una distribución que permite maximizar la refrigeración sin irnos a niveles de ruido excesivos son las principales señas de identidad de esta Fractal Design Mood.
La limitación de fuentes a tamaños SFX o SFX-L es algo restrictiva a la hora de elegir componentes. Por suerte, hoy en día el formato SFX ya está mucho más extendido que antaño y tenemos opciones de todas las potencias y precios. Por lo demás, placas Mini-ITX hay también donde elegir, y los 32,5 cm de tarjeta gráfica que podemos meterle nos deja un abanico bastante amplio de modelos de todas las gamas, para montar un ordenador más que capaz.
Su precio de 169,99 euros es algo elevado si tenemos en cuenta el tamaño y materiales. Es cierto que la distribución está bien pensada y que tenemos un riser PCIe x16 ya integrado de serie, pero quizás echamos en falta algún toque de aluminio para sustituir el plástico de la zona superior, por ejemplo.
Podemos decir que esta Fractal Mood compité con la Fractal Terra dentro del mercado de cajas ITX de la compañía. La Terra es algo más cara pero los materiales son más premium, y el formato permite una mayor sencillez del montaje. Por otro lado, la Mood cambia completamente el diseño y podríamos decir que transciende un poco de lo que es un PC convencial.
De lo que no hay ninguna duda es que la Fractal Design Mood es una de esas cajas que llama la atención y que nos va a permitir tener un ordenador más que solvente, con buena refrigeración y nivel sonoro bajo, con un diseño elegante y que podremos poner en cualquier parte sin ocupar apenas espacio.
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- Producto: Fractal Design Mood
- Fecha: 18/06/2024 15:50:35