DFI lanza un ordenador industrial para Edge Computing con resistencia IP69K contra polvo y agua

No es ninguna sorpresa que los ordenadores modernos requieren de grandes capacidades de refrigeración, algo que es aún más importante en aplicaciones como el Edge Computing, equipos que deben estar funcionando durante meses y meses sin sufrir ningún tipo de problema en su operatividad.

Sin embargo, cuando estos equipos se encuentran a la intemperie, no podemos confiar en sistemas de refrigeración tradicionales, razón por la que el DFI EXC700-AL con resistencia IP69K es interesante, pues además de su resistencia a los elementos, es capaz de funcionar a temperaturas extremas de entre -40 y 70ºC, además de contar con un sistema de drenaje inteligente para casos en los que la condensación sea un problema.

Externamente nos encontramos con un diseño pasivo que utiliza la carcasa del equipo al completo para evacuar el calor generado por los procesadores Intel Atom que encontraremos en su interior, además de contar con multitud de sistemas de conexión inalámbrica y cableada con conectores también resistentes a los elementos.

Este equipo está pensado para aplicaciones en las que se requiere recolección de datos, como sería gestión de tráfico, instalaciones de energía, estaciones meteorológicas, o incluso en fábricas con temperaturas o humedades extremas, como serían las fábricas de equipamiento de refrigeración.

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