SteamOS 3.7.15 pule Steam Deck con mejoras de batería, audio y soporte para ROG Ally y Legion Go

Valve lleva tiempo empujando SteamOS para que pase de ser “el sistema de la Deck” a convertirse en la base de cualquier consola PC que se quiera tomar en serio. Es una distribución basada en Arch, sí, pero con decisiones muy concretas para que el usuario no tenga que pelearse con la trastienda de Linux.

La 3.7.15 no llega con trompetas, llega con destornillador: aprieta tornillos, engrasa bisagras y corrige lo que necesitan los juegos. Al mismo tiempo, acompaña el ritmo de otras dos líneas de trabajo que no son menores: una Steam Store rediseñada y una beta del cliente de Steam que entiende estados de arranque seguro y TPM para convivir mejor con antitrampas modernos. 

Lo que cambia en Steam Deck cuando vuelves a encenderla

Los límites de reloj y energía, esa pareja que decide cuánto corre y cuánto se calienta la máquina, vuelven a respetarse con más fiabilidad después de un reinicio. No parece un titular, pero quien ajuste TDP y reloj para un indie, y después pase a un AAA, sabe lo irritante que resulta “perder” el perfil.

También mejora la estimación de batería, un detalle crucial en portátil, porque organiza sesiones, viajes y descansos sin sobresaltos. Y regresa la activación por Bluetooth, incluido BLE, lo que hace que usar la Deck acoplada con mandos o teclados inalámbricos sea menos lotería y más rutina.

Audio y accesibilidad: arreglos que evitan sustos

El volumen que saltaba al cien por cien al quitar unos auriculares con cable era un clásico del susto nocturno. Se acabó. La conmutación ahora es sensata y la consola detecta dispositivos de audio USB sin obligarte a bucear en menús.

La captura por el micrófono integrado deja atrás distorsiones y artefactos que arruinaban chats o clips rápidos. Y Valve se carga el perfil Pro Audio en el escritorio KDE. Aquí hay una lectura clara: SteamOS prioriza que todo suene siempre, aunque no sea el perfil “más purista”.

Terceros en el radar: ROG Ally y Legion Go se sienten atendidas

La 3.7.15 no mira solo a la Deck. Corrige la detección de los botones de agarre de la ASUS ROG Ally tras salir de suspensión y mejora la compatibilidad del modo FPS de Legion Go, además del modo de mando independiente y el camino de firmware.

Esto implica que Valve está manteniendo una base común de quirks para HID, suspensión y energía que los fabricantes pueden aprovechar sin reinventar la rueda.

Seguridad: por qué la lista de CVE importa, aunque no la memorices

Una actualización que parchea CVE conocidos no es marketing, es higiene. Hablamos de piezas que van desde kernel y gráficos a pila de audio y Bluetooth. En un sistema que vive conectado, con cuentas y compras, cerrar puertas es tan importante como abrir funciones.

En SteamOS además hay un matiz interesante: su base rolling, inspirada en Arch, obliga a Valve a vigilar de cerca dependencias para que “lo último” no rompa “lo de siempre”. Ese equilibrio entre cadencia y fiabilidad se gana parche a parche, justo lo que vemos aquí.

La tienda renovada y la beta de Steam encajan con el plan

La Steam Store con nueva cara no solo cambia muebles; reorganiza la información para que descubrir juegos, leer valoraciones y reclamar ofertas sea más directo en pantallas pequeñas. La beta del cliente que detecta arranque seguro y TPM se mueve en otro carril, pero afecta al mismo viaje: facilitar la vida a antitrampas que piden garantías del entorno.

La actualización cuenta una historia de prioridades. No hay un gran banner nuevo, hay un catálogo de certezas: los perfiles de energía se respetan, el audio no te traiciona, el Bluetooth despierta cuando debe, el lector de pantalla llega a más gente, y en máquinas de terceros los botones son botones tras dormir y despertar. Ese tipo de disciplina técnica es la que fideliza.

SteamOS 3.7.15 es una puesta a punto de las que no presumen, pero cambian la sensación de uso. La Deck recuerda mejor cómo querías que funcionara, suena cuando tiene que sonar y no asusta cuando conectas o quitas cosas. Las portátiles de otros fabricantes encuentran una base más estable. Los parches de seguridad acallan preocupaciones invisibles pero reales. Y alrededor, la tienda y el cliente beta empujan para que el ecosistema se sienta cohesionado. No hay pirotecnia, hay confianza. Y en un dispositivo que llevas a la mochila, que conectas en el salón o que prestas a alguien sin miedo a que “se rompa algo”, la confianza es lo que acaba marcando diferencia.

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