MSI MAG B650 TOMAHAWK WIFI Review

Introducción a las características de la MSI MAG B650 TOMAHAWK WIFI

Actualmente podemos encontrar placas base AMD B650 por unos 230 Euros, en las gamas más bajas obviamente, aunque hay que tener algo de cuidado con las prestaciones que presentan. Aunque muchas de las mejoras de esta plataforma vienen de la mano del propio procesador la implementación de estas viene de la mano del integrador de la placa base y suelen gestionar sus gamas y precios en base a estas prestaciones y muchas veces el chipset es el punto de inflexión, cosa que veremos claramente en nuestra review de la MSI MAG B650 TOMAHAWK WIFI. 

Con esto quiero decir que, aunque nuestro deseado procesador Ryzen 7000 tenga ciertas prestaciones en el propio procesador, como un montón de líneas PCI Express 5.0 para gráficos y almacenamiento, lo cierto es que es raro que veamos esta prestación en placas base basadas en el AMD B650, quizás si en el B650E (no en todas las placas), pero no en estos modelos más económicos. Tendremos que conformarnos con PCI Express 4.0 que está bien ahora, pero pronto lo echaremos de menos al menos en unidades de almacenamiento que llegaran pronto y con mejoras de rendimiento más que notables.

Características técnicas de la MSI MAG B650 TOMAHAWK WIFI

• Socket: AM5
• Chipset: AMD B650
• Memoria: 4x DIMM DDR5 hasta 6600+ AMD EXPO
• Almacenamiento SATA: 4 x 6Gbps RAID 0, 1, 10, 2x SATA 6gbps sin RAID
• Almacenamiento PCIe: 3x M.2 2280 Socket3 PCI Express 4.0 4x.
• Slots: 1x16x PCI Express 4.0, 1x PCI Express 4.0 formato 16x (enlace máximo 4x), 1x PCI Express 3.0 1x
• DSP de sonido: Realtek ALC4080
• Configuración de alimentación: 14+2+1 fases, VRM Digital, doble entrada EPS 8 contactos. 
• Otros: Iluminación ARGB, Conectividad USB 3.2 Gen2x2 20Gbps USB-C con carga rapida, HDMI 2.1, Displayport 1.4, Ethernet 2.5GbE, Wifi-6E, Bluetooth 5.3

Chipset AMD B650

Los chipsets de AMD realmente no deberían ser significativos teniendo en cuenta que es el IOD del procesador Ryzen el que ofrece casi todas las prestaciones conectivas de última generación. El chipset sigue ahí para conectividad de legado como los conectores SATA, ampliar funcionalidad conectiva PCI Express y añadir también puertos periféricos como USB.

Sea como fuere tanto AMD como los integradores de sus chipsets, me refiero a los fabricantes de placas base, lo usan como un método rápido y efectivo de clasificar sus propios productos de cara a posicionarlos en el mercado. Esto significa que no veremos las mejores prestaciones de estos procesadores en el AMD 650.

El chipset B650 tiene una variante “Extreme” que si soporta las líneas PCI Express 5.0 incluidas en todos y cada uno de los AMD Ryzen 7000. No en este modelo. Soporta un total de 36 líneas PCI Express, 24 proporcionadas por el procesador y 8 por el chipsets. Las del procesador estarán limitadas a PCI Express 4.0. No es un problema significativo, pero perdemos una de las prestaciones estrella de los nuevos procesadores de AMD.

Lo que si nos permite el chipset es overclock del procesador, con multiplicador liberado, añade también hasta 6 puertos USB de 10Gbps, 1 puerto USB de 20Gbps y un máximo de 4 puertos SATA 6Gbps con modo raid.

La conectividad de esta generación con respecto al procesador sigue siendo un enlace PCI Express 4.0 de 4x, como en la generación anterior, pero añade otras prestaciones conectivas que no veíamos en los modelos anteriores. Añade, por ejemplo, puertos PCI Express extra, hasta 8 líneas PCI Express 3.0.

Almacenamiento en la MSI MAG B650 TOMAHAWK WIFI

Con estos mimbres lo que tenemos en este modelo es de una versión limitada de lo que puede ofrecer AMD y seguramente esta limitación en sus chipsets es en buena medida uno de los lastres del éxito de esta generación de procesadores que por otro lado son los más capaces de cuantos podemos encontrar actualmente en el mercado doméstico. Esta es una realidad no solo basada en rendimiento sino también teniendo en cuenta sus prestaciones integrada, en parte limitadas en modelos de chipset como este.

Aparte de estas tristes limitaciones lo cierto es que esta placa base está bastante bien equipada en referencia a almacenamiento masivo en placa. Cuenta con tres slots M.2 de hasta 80mm de largo y estándar de 22mm de ancho.

Los dos primeros, los más cercanos al socket de la CPU, están directamente soportados por el procesador. Admiten unidades PCI Express 4.0 con enlaces 4x (64Gbps), esto nos servirá para dar buen acondicionamiento a unidades de almacenamiento actuales, pero quedaremos fuera de las futuras unidades PCI Express 5.0 que están ya muy cerca de llegar al mercado.

El tercer slot esta soportado por el chipset directamente. También admite la misma velocidad de enlace, pero en nuestra experiencia será algo más lento, mínimamente, que si usamos uno de los slots controlados por el procesador. Curiosamente solo el slot 1 y 3 están equipados con disipadores de aluminio que a su vez disponen de thermal pads para mejorar la transferencia de calor. Es un detalle que mantendrá a raya las altas temperaturas de trabajo de las unidades de más rendimiento.

El equipamiento se potencia con seis conectores SATA 6Gbps de los cuales solo cuatro son aportados por el chipset, los otros dos usan una controladora adicional por lo que no se pueden añadir a la funcionalidad RAID del chipset. Esta controladora permite modos RAID 0 y 1 en los slots M.2 y RAID 0, 1 y 10 en los conectores SATA.

Ampliación y conectividad de la MSI MAG B650 TOMAHAWK WIFI

Toda la gama Tomahawk de MSI es sencilla, modelos de placa bien organizados y que van a las prestaciones esenciales para disponer de un ordenador de última generación. La conectividad de tarjetas de ampliación y periféricos es también sencilla, pero tiene todo o casi todo lo que podemos esperar de un ordenador basado en los nuevos procesadores Ryzen 7000 de AMD. Cierto es que no tendremos PCI Express 5.0, limitación del chipset, pero creo que el equipamiento es adecuado, aunque básico.

Dispone de tres slots de ampliación, solo uno de ellos con capacidad 16x y suministrado desde el procesador para dar soporte a tarjetas gráficas con interfaz PCI Express 4.0 que por el momento es el máximo que encontramos en graficas de última generación. Este slot esta potenciado con soldaduras a una sola cara y refuerzo mecánico metálico para que las gráficas más grandes y pesadas no pasen factura a la integridad del slot principal.

Le acompañan otros dos slots PCI Express soportados por el chipset. El primero de ellos tiene aspecto de 16x, pero en realidad electrónicamente solo soporta 2x en formato PCI Express 4.0. Entre este y el principal hay dos slots de separación así que quedara libre usando graficas grandes, de hasta tres slots de ancho.

El tercer slot es de tipo 1x con velocidad de enlace PCI Express 3.0. Esta soportado por el chipset y puede sacarnos de un apuro para aumentar la conectividad del PC. Todo esto se potencia con una conectividad USB cuidada tanto para el frontal como para el panel de conectores traseros de la placa.

El frontal soporta hasta cuatro puertos USB 2.0, dos puertos USB 3.2 Gen1 tipo A de 5Gbps y un puerto USB 3.2 Gen2x1 con hasta 10Gbps de ancho de banda y conector tipo C. La parte trasera no se queda atrás con dos puertos USB 2.0, cuatro puertos USB 3.2 Gen1 tipo A de 5Gbps, 3 puertos USB 3.2 Gen2 de tipo A y 10Gbps y un puerto de alta velocidad USB 3.2 Gen2x2 de 20Gbps en formato USB-C.

En el panel de conectores traseros encontraremos también dos conectores gráficos, para la gráfica integrada en los Ryzen 7000 (de momento todos los modelos la llevan), con un HDMI 2.1 capaz de mostrar video 4k hasta 60Hz y un conector Displayport 1.4 capaz de dar vida a pantallas 8k con hasta 60Hz de frecuencia vertical.

En cuanto a conectividad de red encontraremos un puerto Ethernet de 2.5GbRE de ancho de banda máximo firmado por un chipset Realtek RTK8125B capaz también de conectar con redes más lentas de 1000, 100 y 10mbps. La conectividad inalámbrica también es muy completa y está firmada por un chipset AMD Wifi-6E RZ616 diseñado en colaboración con Mediatek y que se ha convertido en la base conectiva de muchos ordenadores portátiles con procesadores AMD.

Este módulo proporciona conectividad Wifi-6E en configuración de antenas 2x2 con velocidades de acceso de hasta 2.4Gbps en la banda de los 5GHz con canales de hasta 160MHz. Se acompaña de soporte Bluetooth en su versión más reciente, la 5.3, consiguiendo un buen soporte de todo tipo de conectividad y acceso a redes inalámbricas de alta velocidad.

En esta placa base podemos montar hasta 128GB de memoria RAM DDR5 en cuatro bancos y cuádruple canal de 32-Bit, los 128-Bit habituales en DDR4, pero reconfigurados internamente en las nuevas memorias DDR5. Actualmente no podemos encontrar módulos con tal densidad, pero quizás si en el futuro. 128GB si son bastante más accesibles, aunque a precios elevados. La plataforma soporta oficialmente memorias DDR5-5200 pero con perfiles EXPO esta placa base puede perfectamente superar los 6600+ MHz con las memorias adecuadas, sobre todo de una sola cara, de un 1 Rank de densidad.

El resto de conectividad incluye conectores PWM dedicados para ventilador de CPU y bomba de impulsión para kits de refrigeración líquida, 6 conectores para ventiladores de sistema, conector de audio frontal HD-Audio, 2 conectores ARGB de 5v y tres pines, 2 conectores RGB LED de 12v, conector para TMP 2.0 por hardware (no muy necesario con procesadores como los que puede integrar). También dispone de cuatro leds de diagnóstico de arranque, algo básicos, pero al menos con algo de información, echando de menos el típico panel POST que ofrece más variedad de estados de diagnóstico.

Diseño y alimentación

Hace poco probamos la hermana mayor de este modelo, dentro de la misma serie y la verdad es que son muy parecidas en todos los aspectos. La única diferencia es el chipset y con ello pues parte de las capacidades conectivas de cada modelo. Ambas son placas base sencillas, sin elementos llamativos, que buscan ofrecer funcionalidad y buena distribución de cada elemento de la placa.

Con un diseño básicamente en negro la placa deja mucho espacio para disipadores convencionales de gran tamaño. Cada conector esta donde esperamos que este y tiene elementos integrados interesantes como el cubre conector trasero. La disipación es la adecuada para sus necesidades, siendo completamente pasiva, tanto para el chipset como para el intrincado sistema de alimentación de la CPU.

El sistema de alimentación incluye 14 fases desdobladas, como en su hermana mayor, disponiendo de un controlador digital. La MAG B650 TOMAHAWK WIFI cuenta con doble entrada auxiliar EPS de 12v, con doble fase SOC, para el procesador además de dos fases auxiliares para la memoria RAM. Se ha fabricado con un PCB de 8 capas (IT-170GR), de grado estación de trabajo, con 2oz de cobre para mejorar la conductividad.

Sonido

Lo que si varía entre ambos modelos es el DSP que da vida a la tarjeta de sonido integrada en la placa. La X670E montaba un Realtek ALC1200 con conexión USB, uno de los chipsets más extendidos en la actualidad en las gamas alta de muchos fabricantes, integrando en este modelo un chipset también muy capaz, pero algo inferior. Se trata de un Realtek ALC4080 también integrado mediante una conexión USB soportada por el chipset. Este DSP ofrece 32-Bit de resolución con sampleados de hasta 384KHz.

MSI diseña su sistema de sonido mediante un PCB completamente aislado donde además se usan diferentes capas del PCB para aislar los canales derechos e izquierdos. Se usan también componentes de alta calidad, como son los capacitadores solidos Chemi-Con dorados para sistemas de grado Hi-Fi.

Dispone también de sistema “anti-pop” para evitar esos desagradables sonidos cuando desconectamos alguno de los conectores analógicos de que dispone. Soporta sistemas 7.1 con “auto-sensing” y cuenta también con una conexión SPDIF óptica para conexión de sistemas digitales sin perdida.

Lo único que podemos echar de menos es algún DAC de alta resolución que nos permita dar mejor vida a altavoces y auriculares de alta impedancia. No lo encontraremos en este modelo que como ya hemos comentado está pensando para ir reduciendo los costes de acceder a lo mejor de esta nueva plataforma de AMD.

Bios y software

La bios UEFI de MSI es ya una vieja conocida. Combina grandes prestaciones a nivel de personalización del rendimiento de nuestro sistema, pero también es una bios accesible para aquellos que no tengan toda esa experiencia para sacar “jugo” de su sistema.

Para ello pone en manos del usuario varios asistentes o “Wizard” con los que parametrizar elementos como el overclocking del procesador, la gestión de los ventiladores y el ruido y cuenta también, como no, con asistentes para acceder a los perfiles de memoria EXPO diseñadas para sistemas AMD basadas en DDR5.

Configurar el arranque del sistema, monitorizar el rendimiento y acceder a todas las posibilidades de configuración del sistema es bastante fácil con esta generación de bios. MSI además nos introduce para Windows su aplicación de ecosistema MSI Center que facilita la instalación de aplicaciones, monitorización del sistema en Windows o actualizaciones de drivers y bios.

MSI además incorpora la instalación automática en Windows con un único aviso de instalación nada más instalar Windows de nuevo. De este modo nos evita buscar por internet los drivers y tampoco es muy molesto porque el mensaje solo saldrá en el sistema una única vez, si perdemos la oportunidad solo tendremos que buscar la descarga de MSI Center en la tienda de aplicaciones de Windows 10 o Windows 11.

Tiene perfiles de uso para que nos seleccione las aplicaciones más adecuadas para nuestro uso, pero por supuesto podemos instalar todas las que queramos, algunas están especialmente destinadas a la colaboración entre dispositivos MSI, creando un ecosistema de hardware apoyado en software de calidad.

El B650 también es adecuado para los micros más potentes

A falta de las placas base más baratas de AMD para AM5, que llegaran de la mano del chipset A620, esta serie nos ofrece un punto de partida de lo que puede ser la gama baja de AMD. En resumen, los procesadores que montemos en ellas correrán igual o prácticamente igual que en los chipsets de gama más alta, con placas base sensiblemente más caras, pero estarán más limitados a nivel conectivo.

Actualmente no hay tarjetas gráficas PCI Express 5.0 y sinceramente creo que tampoco vayan a cambiar mucho el rendimiento de los chipsets gráficos que estén por llegar, más allá de lo que puedan ofrecer por sí mismos quiero decir. Por otro lado, las unidades de almacenamiento PCI Express 5.0 sí que están más cerca, pronto serán fáciles de encontrar en las tiendas.

Quizás este punto si podamos echarlo de menos en algún momento de la vida útil de un PC basado en esta nueva plataforma AM5. Es una pena, pero no deja de ser cierto que el procesador que vayamos a montar en esta placa base ira igual de rápido, con escasa diferencia, en una placa base más económica como esta y lo mismo podríamos adelantar del nuevo chipset A620 que promete placas base por unos 100 euros.

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