OCZ Enyo. Esto si es aprovechar el USB 3.0

Introducción

Introducción.

Poco a poco empezamos a ver soluciones USB 3.0 que sean capaces de aprovechar de forma intensiva el estándar 3.0 del Universal Serial Bus el cual es un portento en cuanto a transferencia de datos y que sin duda traerá consigo una revolución del modo en que entendemos el almacenamiento y conectividad externa.

OCZ no solo aprovecha este nuevo interfaz sino que lo combina con una de las cosas que mejor sabe hacer que es producir unidades SSD de altas prestaciones. El OCZ Enyo es una combinación perfecta entre USB 3.0 y SSD.

OCZ Enyo

OCZ Enyo.

Esta unidad sorprende por su aspecto y formato. Es un pequeño disco duro de apenas 87 gramos de peso conformado por una carcasa de aluminio anodizado con un único interfaz USB 3.0 Micro. Mide mucho menos que un disco de 2.5” y también pesa bastante menos. Tiene las ventajas habituales de un SSD, como es la fiabilidad, la durabilidad y la potencia de proceso con la facilidad de uso que incorpora el USB 3.0.

Como cualquier otra unidad con este interfaz podemos usarla tanto en modo 3.0 como en 2.0 así que no encontraremos ningún problema de compatibilidad en ningún tipo de ordenador salvo las limitaciones de velocidad intrínsecas al estándar 2.0 que le limitara a unos 30MB/s de lectura y escritura.

Una unidad compacta y bien construida. sólida y bella.

En sus apenas 10mm, 120x56mm son sus otras dimensiones, de espesor encontraremos versiones de 64, 128 y 256GB. Estas dos últimas son las que desarrollan mejores prestaciones técnicas con velocidades de lectura de hasta 260MB/s, de escritura de 200MB/s y de escritura sostenida de 150MB/s. Su tiempo de acceso medio es menor a 100 microsegundos.  La unidad de 64GB tiene prestaciones un poco inferiores por su configuración de módulos de memoria. Este modelo en concreto mantiene velocidades de lectura de 225MB/s, escritura de 135MB/s y escritura sostenida de 40MB/s.

El interfaz MicroUSB 3.0 no debe asustaros. El conector al PC es compatible con USB 2.0 y 3.0.

El Enyo dispone de una electrónica diseñada a su medida y administrada por una controladora Indilinx que es la misma que dio vida a la primera generación de discos Vertex que aun después de pasado más de un año aún se mantienen en la brecha en cuanto a prestaciones y velocidad de transferencia.

Controladora Indilinx, 64MB de cache en placa, controladora USB 3.0-SATA2 y 16 módulos de memoria.

Cuenta con 64MB de cache en placa y su propio sistema de recolección de basura con el que mantiene al disco en plenas prestaciones por intensivo que sea su uso en procesos de borrado y copia.   Dos leds de actividad nos informaran de la correcta alimentación de la unidad y de la entrada y salida de datos.

Su consumo se reduce a 2.4w en plena carga, 1.9w de media y 1.1w en estados de reposo. Su esperanza de vida de uso ronda el millón y medio de horas de media antes de sufrir fallos y está garantizado con 3 años con soporte directo de OCZ.   

En nuestra muestra de 128GB cada modulo monta 8GB de capacidad. Esta combinados en una estructura MLC.

Probándolo a fondo

Probándolo a fondo.

Hemos sometido a esta unidad a una pequeña comparativa con otros sistemas de almacenamiento, incluido un disco mecánico conectado por USB 3.0, así como otros estándares internos como SATA 3 y SATA2. Los datos del Enyo son sin duda interesantes ya que permite velocidades que no alcanza ni el mejor de los discos mecánicos en un interfaz de acceso tan directo como es el USB 3.0.

Rendimiento en Atto Diskbenchmark 2.46. Lectura. Velocidad en KB/s en transferencias de n KB.

Rendimiento en Atto Diskbenchmark 2.46. Escritura. Velocidad en KB/s en transferencias de n KB.

De hecho en operaciones de “vida real” como puede ser hacer un backup de un juego de Steam la verdad es que sorprende su rendimiento con velocidades que nos permiten hacer un backup de más de 6GB en prácticamente un único minuto.

7GB en poco más de 1 minuto. Asi da gusto hacer un backup.

Acompañado de una placa base con una verdadera integración de USB 3.0, como es nuestra ASUS Crosshair IV Formula, los resultados salen solos, basta ver como es capaz de mover datos entre un disco SATA3 y el mismo.

Leyendo de Enyo a un disco mecánico SATA 6gbps de Western Digital.

Copiando de disco mecanico SATA 6gpbs a Enyo mediante USB 3.0.

Análisis y Conclusión

Análisis y Conclusión.

Potencia, ligereza y resistencia. Esto es lo que encontraremos en el Enyo de OCZ. Tiene soporte de legado para estándares antiguos y toda la potencia que desarrollan los estándares más modernos. Una unidad todo terreno que se defiende con las prestaciones habituales de durabilidad y fiabilidad de un disco SSD en un formato tan propio como es una caja externa compacta y sólida.

Enyo es el primero de una generación de discos que combinarán ambas tecnologías.

Su capacidad de rendimiento es notable y la convierte en el compañero de viaje que todos desearíamos tener. La única pega, como suele ocurrir con todo lo SSD de cierto nivel, es que su precio es elevado. El modelo de 64GB, con sus limitaciones de velocidad, cuesta unos 170€, el modelo de 128GB, el más interesante, alcanza casi los 300 Euros y el modelo, inalcanzable para un bolsillo normal, de 256GB se pone en más de 600 Euros de coste. Un precio que lo aleja del gran público pero que en su versión de 128GB puede ser una interesante inversión para el que quiera cuidar de sus datos y no quiera prescindir de velocidades de vértigo.

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