En una gran victoria para los usuarios europeos, tras varias multas relacionadas con el tratamiento por parte de Meta de los datos de los usuarios, finalmente se ha ilegalizado el actual modelo de seguimiento de Facebook, el cual fuerza a los usuarios a aceptarlo al ponerlo como requisito en sus términos y condiciones de uso.
En resumidas cuentas, la práctica de Meta de exigir a los usuarios que den su consentimiento para el seguimiento a través de sus términos no es legal según la GDPR, de modo que Facebook, Instagram y WhatsApp deben ofrecer una opción de tipo “si o no” para que los usuarios puedan dar su consentimiento de forma activa a este seguimiento permanente o rechazarlo.
Se trata de un gran golpe para el modelo comercial de publicidad basado en vigilancia de Meta, pero es posible que, si nos negamos a sufrir este seguimiento permanente, algunos sitios web que confían en el Pixel de Facebook dejen de funcionar correctamente, por lo que es de esperar que la compañía haga cambios a su sistema para que esto no ocurra.
En principio, hasta el mes que viene no existirá una decisión final para decidir si esto es ilegal de forma permanente o se realizan cambios a esta sentencia, pero es posible que, junto a ello, Meta reciba otra multa más –además de la reducción de ingresos que el fin del seguimiento implicará—.
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