Cuando la IA generativa se integra en tu navegador
Soy un gran aficionado a los navegadores. Siempre varios de ellos instalados en mi ordenador y mi móvil. Ahora mismo, estoy usando principalmente Mozilla Firefox, pero es posible que tarde poco en cambiar. Desde hace tiempo, he visto cómo la IA ha empezado a ganar terreno en la navegación web. Algunas integraciones son útiles, aunque descafeinadas. También hay quien se arriesga lanzando navegadores de corte agéntico.
De todo esto voy a hablarte en los próximos párrafos. Mi idea no es proponerte una mera lista de navegadores con IA integrada. En realidad, quiero explicarte cuáles he estado probando y para qué te recomiendo cada uno de ellos. Además, te hablaré de uno que se mantiene firme en este asunto y está resistiendo la corriente de la IA, negándose a integrarla. ¿Comenzamos?
Tres niveles de integración
Antes de poner manos a la obra, quiero hablarte brevemente sobre los tres niveles de integración de la IA en navegadores web. Obviamente, esto no atiende a ningún estándar ni criterio consensuado, sino a lo que yo he podido experimentar en los últimos meses.
Para mí, existen estos tres tipos de integración:
- Agéntica. No hay muchos de estos, pero empiezan a salir al mercado. Me refiero a los navegadores que permiten delegar en la IA la navegación web y las tareas, sin que el usuario tenga que hacer nada más que enviar una petición. Actúan como agentes de IA capaces de tomar decisiones y ejecutarlas por su cuenta en el navegador.
- Asistencia. Es la integración más clásica. El chatbot de turno se integra en una barra lateral para que el usuario resuelva dudas sobre lo que está viendo en Internet. Algunos de estos servicios se conectan de forma muy discreta con la navegación para ser capaces, por ejemplo, de resumir el sitio web, ayudar en la escritura de textos y más.
- Acceso directo. Este es el nivel de integración más bajo. Básicamente, el navegador permite al usuario hacer consultas rápidas a la IA desde alguna zona de la interfaz, pero poco más.
Y, como ya te dije, hay algún que otro navegador que no quiere tocar la IA ni con un palo, pero me lo guardo para el final.
Perplexity Comet es el navegador de la era agéntica
Voy a empezar por uno de los navegadores más sorprendentes que he probado últimamente. Me refiero a Comet de Perplexity. Esta es una propuesta muy alejada de lo que ya conoces. Básicamente, es uno de los primeros navegadores agénticos que puede descargar cualquier usuario. La idea es que la IA tome el control de la navegación para ejecutar tareas complejas.

Por ejemplo, esto te permite pedirle al chatbot, que se integra en un panel lateral, que busque hoteles en Booking, en unas fechas concretas, en un lugar específico y que envíe las opciones más baratas a una hoja de cálculo. Algo similar pude hacer en el análisis de Comet que te invito a leer con detenimiento.
Hoy por hoy, este navegador es experimental. Lo es porque es muy lento y porque la IA todavía podría alucinar en mitad de una tarea. Personalmente, no delegaría en el chatbot de Comet ninguna tarea importante. Sin embargo, es posible que este sea un acercamiento a la navegación web del futuro, donde sea posible dejar que el navegador vaya trabajando en segundo plano mientras nosotros hacemos otras cosas.
Por el momento, Comet no está disponible para dispositivos móviles.
Dia Browser es uno de los novatos
Con permiso de Comet, Dia Browser es uno de los navegadores más jóvenes del listado. Por el momento, solo está disponible para macOS. Un detalle que no me gustó al probarlo es que te obliga a crear una cuenta. No obstante, cuenta con algunas detalles interesantes.

Sin ir más lejos, cuenta con memoria. Eso quiere decir que va aprendiendo de las consultas y tareas que encomiendas a la IA. Gracias a esos “recuerdos”, el navegador es capaz de actuar como un asistente totalmente personalizado. Lo de la privacidad es otro tema.
Más allá de eso, las herramientas son parecidas a las del resto. No he conseguido que la IA actúe sobre el navegador o los sitios web que he abierto, así que Dia todavía se sitúa en el nivel de asistencia.
Microsoft Edge, el pionero de los navegadores con copilotos
Microsoft Edge fue uno de los navegadores pioneros en esto de integrar la IA. Al principio, todo se gestionaba desde Bing Chat, pero después todo quedó en manos de Copilot. A esta solución también le dedicamos una guía completa. De hecho, te animo a repasar los mejores trucos de Copilot en Edge.

Actualmente, Copilot en Edge te proporciona los siguientes servicios:
- Panel lateral. Un chatbot para resolver dudas rápidas. Cuenta con los últimos modelos de OpenAI, así que puedes aprovecharlo para usar GPT-5 sin límites. Este panel lateral está ligeramente conectado con la navegación, permitiendo invocar pestañas (hay que introducir una arroba y escribir el nombre de la web abierta), resumir contenido y hacer preguntas usando el contenido como contexto.
- Modo de voz. Copilot en Edge también cuenta con el modo de voz, que te permite conversar con la IA. Esto es útil, por ejemplo, para ir haciendo preguntas a medida que se navega por la web.
- Herramientas de escritura de Copilot. En campos de texto, la IA de Edge te ayuda a escribir, extendiendo textos o convirtiéndolos en listas. Son las típicas herramientas de escritura, similares a las de Apple Intelligence.
- Pregúntale a Copilot. Esta función aparece en el menú contextual después de seleccionar un texto. También se muestra al abrir documentos PDF con el navegador.
Algo notable es que esta integración, en parte, se encuentra en las apps móviles de Edge.
Mozilla Firefox está integrando la IA a pesar de las críticas
Mozilla Firefox, que es el navegador que uso ahora mismo, lleva varias versiones integrando la IA. Lo curioso es que los usuarios más fieles no están muy de acuerdo con esta estrategia. El navegador incluso ha tenido problemas de rendimiento debido a procesos de IA.
Sea como fuere, la verdad es que muchas de las herramientas basadas en IA que ahora tiene Firefox me han resultado útiles. Eso sí, todas funcionan con servicios externos a los que el navegador consultará para completar las distintas tareas.

En esencia, Firefox tiene un panel lateral donde vas a poder seleccionar un chatbot, como ChatGPT, Gemini o Le Chat de Mistral. A partir de ahí, el navegador envía peticiones para resumir una web, para resolver dudas o para mejorar un texto. La integración, en este caso, es mucho más espartana. Aunque una tarea la ejecutes desde fuera del panel lateral, la consulta se hará allí mismo.
Además de esto, Firefox está integrando pequeños modelos de lenguaje para resolver otras cuestiones, como agrupar pestañas de forma inteligente. No obstante, estos se ejecutan de forma local.
Por el momento, Firefox para móviles no incluye ninguna de estas funcionalidades.
Brave tiene a Leo
Además de los ejemplos que te he mencionado, hay muchos otros navegadores pequeños que están haciendo lo propio e integrando la IA en sus interfaces. Un ejemplo es Brave, que cuenta con su propio servicio, Leo. En realidad, usa modelos de otras empresas, pero se centra en ofrecer privacidad.

Leo está diseñado como un asistente de IA nativo del navegador, lo que le permite interactuar directamente con el contenido de la web de la misma forma que lo hace Edge: leyendo el contenido de la página actual para resumir artículos, analizar documentos o generar texto nuevo.
La gracia de Brave no está en sus funciones, sino en la privacidad. La compañía asegura que los chats y las peticiones no se utilizan para entrenar modelos de IA, y que además no almacenan tus conversaciones ni tus indicaciones. Más allá de eso, no hay mucho que destacar, más allá de que Leo está disponible en las versiones de escritorio y móviles del navegador y que tiene un claro enfoque hacia la privacidad. Es una de las integraciones más ligeras que he probado hasta ahora, con la excepción de Chrome, claro.
Aria es la IA de Opera
Personalmente, Opera es uno de los navegadores que menos me atraen. Ahora bien, sé que hay muchos usuarios a los que les encantan sus funciones extra. Entre ellas, está Aria, la IA que se ejecuta en el panel lateral del explorador. Lo mejor es que se encuentra integrada en las diferentes versiones del navegador, incluyendo Opera GX, que se presenta con un estilo gaming de manual.

Entre sus funciones está la generación de imágenes, comandos para controlar las pestañas y el acceso rápido a la IA con un atajo de teclado. Otro punto a favor que destaca Opera es que no es necesaria ninguna cuenta, aunque esto es habitual en la mayoría de los casos.
En este caso, Aria sí que está disponible en todos los dispositivos, incluyendo las versiones móviles de Opera.
El curioso caso de Google Chrome
La última integración que te propongo es la de Google Chrome. A pesar de que Google es una de las empresas punteras en esto de la IA, su navegador apenas cuenta con IA generativa. De hecho, el acceso a Gemini es muy descafeinado.

Lo único que puedes hacer de forma nativa (quiero decir, sin instalar extensiones de Chrome) es escribir @gemini en la barra de direcciones y presionar el tabulador. Entonces, todo lo que escribas se enviará como un prompt a Gemini.
Parece que pronto esto podría cambiar. Según anunció Google, pronto se podrá acceder a Gemini en un panel exclusivo. Además, se agregarán muchas otras funciones, algunas de ellas relacionadas con la seguridad del usuario. Parece que la idea es poner Chrome al nivel de Edge, permitiendo conectar las pestañas abiertas con la IA de Gemini y ejecutar tareas. Eso sí, no se espera un nivel de integración tan bestia como el de Comet.
Por cierto, esta integración no funciona en la versión para Android y iOS.
Hay un navegador en Europa que no quiere ni oír hablar de la IA
Y tiene nombre de compositor. Sí, el equipo de Vivaldi, que es una buena alternativa europea a Google Chrome, tiene muy claro que no piensa integrar la IA. Al menos, así era a principios de 2024. Así que, si te preocupa tu privacidad o que tu navegador se llene de funciones que no necesitas, aquí tienes un navegador que actúa como refugio. Además, lo puedes usar como cliente de correo, lector de RSS y gestor de calendarios.
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