Hemos tenido la oportunidad de hablar de Valorant en algunas ocasiones, especialmente debido a su componente anticheat denominado Vanguard. Sea como fuere, todo lo que ha rodeado al juego hasta hoy ha sido en su beta cerrada, algo que termina con su salida al público general.
Valorant llega hoy al público como lo que se considera la competencia por parte de Riot Games contra títulos como Counter Strike: Global Offensive, y con ello hay algunas consideraciones a tener en cuenta. Por ejemplo, todo el progreso realizado durante la beta cerrada se va a perder de forma permanente, incluidos los contratos, agentes desbloqueados y rango competitivo.
De este modo todos los jugadores contarán con cinco agentes, y tendrán todos los contratos pendientes por realizar, además de no tener rango de emparejamiento, de forma que todos los jugadores empezarán de una forma más igualada, más allá de la experiencia real obtenida al jugar durante la beta cerrada en comparación a los que no lo hicieron. Del mismo dinero, si gastamos dinero en skins durante la beta cerrada, también vamos a perderlas, aunque recuperaremos los Puntos Valorant gastados en ellas y un 20% adicional.
Aun así, sí que hay otras cosas que se mantienen, como serían las recompensas de la beta cerrada y el índice de emparejamiento para las partidas públicas, de forma que no tendremos que jugar contra los jugadores más experimentados que nosotros.
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