El formato SFX de fuentes de alimentación ha dejado de ser una rareza y tenemos en el mercado modelos dentro de un amplio rango de potencia y características. Estas fuentes compactas reducían también su potencia en sus inicios, pero hoy en día es posible conseguir potencias similares a las de muchas fuentes ATX. Un claro ejemplo son las nuevas FSP Dagger Pro con modelos de 750 y hasta 850W de potencia con un diseño 100% modular.
Ya hemos probado alguna que otra fuente SFX de 850W, un formato con el que es posible montar ordenadores o sistemas muy compactos sin tener limitaciones de rendimiento por potencia. Con 850W se pueden montar procesadores de alto rendimiento junto con las últimas tarjetas gráficas de la serie RTX 30 de NVIDIA o Radeon 6000 de AMD.
En este caso, la FSP Dagger Pro llega con un diseño de un raíl de 12v, doble conector de 4+4 pines para CPU y hasta cuatro cables PCI Express de 6+2 pines, por lo que podremos alimentar a sistemas de alto rendimiento sin problemas, y todo ello con un diseño modular que permite colocar solamente los cables necesarios, algo que es clave en sistemas muy compactos donde el espacio se aprovecha al máximo.
Todo ello con una certificación de eficiencia 80 PLUS GOLD.
Diseño modular al 100% y refrigeración semi-pasiva se dan la mano en las FSP Dagger Pro
En cuanto a su refrigeración, tanto el modelo de 750W como el de 850W utilizan un ventilador de 92 mm que funciona de manera semi-pasiva, es decir, cuando la fuente está en baja carga se apaga por completo, reduciendo a 0 el nivel de ruido. En concreto, cuando se entrega menos del 20% de la potencia (150W en el caso de la de 750W y 170W en el caso de la de 850W), el ventilador permanece parado.
Ambos modelos ya están disponibles en la propia web de FSP, con un precio recomendado en el mercado internacional de 179,99 dólares para la Dagger Pro 750W y de 209,99 dólares para la Dagger Pro 850W.
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