Microsoft ha comenzado a desplegar una de las actualizaciones más esperadas para los usuarios de ordenadores con procesadores ARM. Con el parche de octubre de 2025 (KB5066835) para Windows 11 25H2 y 24H2, la compañía ha habilitado nuevas funciones de emulación en Prism. La principal novedad es la inclusión del soporte para las instrucciones AVX y AVX2, algo que abre la puerta a miles de juegos y aplicaciones que hasta ahora eran incompatibles.
Hasta la fecha, una de las grandes barreras para la adopción de los PC con arquitectura ARM era su limitada compatibilidad con el software diseñado para procesadores x86. Muchos programas, y en especial videojuegos, dependen de extensiones específicas que no se encontraban en el hardware ARM, provocando que ni siquiera pudieran iniciarse. Esta actualización busca solucionar de raíz este problema a través de una mejora en su software de emulación, eliminando una barrera de entrada clave.
La importancia de AVX para los usuarios de ARM
Las siglas AVX responden a Advanced Vector Extensions, un conjunto de instrucciones introducido por Intel en 2008. Esta tecnología permite al procesador realizar múltiples operaciones de datos de forma simultánea, acelerando de manera significativa tareas complejas. En la práctica, es fundamental para procesos como la codificación y decodificación de vídeo, o para calcular efectos en tiempo real como las físicas en los videojuegos. Su presencia se ha vuelto un estándar en las CPU de Intel y AMD desde hace más de una década.
La ausencia de soporte nativo para AVX en los chips ARM impedía que las aplicaciones que dependen de estas instrucciones funcionaran. Con la nueva versión de Prism, el emulador de Windows 11, el sistema operativo es ahora capaz de traducir estas instrucciones para que el procesador ARM pueda interpretarlas. Esto permite que la gran mayoría de juegos de bibliotecas como Steam y otras aplicaciones de productividad, como algunas de la suite de Adobe Creative Cloud, puedan por fin ejecutarse.
La función se activa por defecto con la instalación de la actualización de Windows 11 (compilación 26100.6725 o superior). Sin embargo, cualquier usuario puede verificar o gestionar estos ajustes de forma manual. Para ello, solo hay que hacer clic derecho sobre el archivo ejecutable de una aplicación, ir a Propiedades y, en la pestaña de Compatibilidad, acceder al menú de compatibilidad de Windows ARM para ajustar las nuevas características de la CPU emulada.
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