¿El fin de la experiencia limpia en ChatGPT? OpenAI ya prueba un sistema de anuncios para rentabilizar sus millones de usuarios

Era un movimiento previsible dentro de la evolución de la industria tecnológica. Hasta el momento, la experiencia de uso en ChatGPT se había mantenido libre de interrupciones publicitarias, basando su modelo de negocio principalmente en las suscripciones premium y el acceso a su API para desarrolladores. Sin embargo, una reciente filtración ha confirmado que OpenAI está realizando pruebas internas para desplegar publicidad dentro de su chatbot, siguiendo una estrategia de monetización muy similar a la que Google ha perfeccionado durante décadas.

Según se ha podido descubrir analizando el código de la versión beta 1.2025.329 de la aplicación para Android, existen referencias técnicas directas a nuevas funciones publicitarias. El desarrollador Tibor Blaho (imagen de portada de su propiedad) ha identificado cadenas de texto que incluyen términos específicos como "search ad" (anuncio de búsqueda), "search ads carousel" (carrusel de anuncios de búsqueda) y "bazaar content". Estos hallazgos sugieren que la compañía busca integrar elementos promocionales directamente en las respuestas o en la interfaz de búsqueda.

La lucha por la atención y la retención del usuario

Este cambio de rumbo responde a una lógica de mercado ineludible en el sector de las grandes tecnológicas. Tanto Google como OpenAI no solo compiten por desarrollar el modelo de lenguaje más capaz y rápido, sino por dominar la economía de la atención. Del mismo modo que el nuevo modo de IA de Google intenta retener al usuario en su propio buscador para evitar que navegue hacia páginas externas, OpenAI parece dispuesta a aprovechar sus masivos volúmenes de tráfico para generar una nueva vía de ingresos publicitarios.

Las tácticas que ahora se vislumbran en el horizonte de ChatGPT recuerdan inevitablemente a las dinámicas propias de las redes sociales y los buscadores tradicionales. Con una base de usuarios que ha crecido de forma exponencial, alcanzando cientos de millones de consultas semanales, la plataforma posee una información contextual sobre las necesidades e intenciones del usuario mucho más profunda que la de un buscador convencional. Esto permitiría a la compañía ofrecer publicidad altamente personalizada basada en el contexto exacto de la conversación en curso.

De momento, la funcionalidad parece estar limitada a entornos de prueba y vinculada principalmente a la experiencia de búsqueda dentro de la app, pero su aparición explícita en el código de la versión beta indica un desarrollo avanzado. La futura integración de estos "carruseles de anuncios" marcaría el inicio de una nueva etapa donde los asistentes de IA dejan de ser herramientas puramente funcionales para convertirse en nuevos escaparates comerciales. Quién sabe si al final los usuarios terminarán echando de menos la búsqueda tradicional.

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