ASUS ROG Xbox Ally X Review

Introducción y Especificaciones Técnicas de la ASUS ROG Xbox Ally X

Aquí tenemos la Review de la ASUS ROG Xbox Ally X, la esperada sucesora de loa ROG Ally X, ahora desarrollada en colaboración con el equipo de Xbox de Microsoft para crear una plataforma de consola portátil de la plataforma Xbox.

Este modelo mantiene Windows 11 como sistema operativo, ahora con una interfaz propia de Xbox para un acceso más directo a los juegos. Lo hace, además, con el nuevo procesador AMD Ryzen AI Z2 Extreme que ofrece hasta un 25% más de rendimiento que el Z1 Extreme de los modelos anteriores, consiguiendo, además, una mayor eficiencia.

Todo ello bajo una pantalla FullHD de 7 pulgadas y un nuevo diseño más ergonómico.

Características Técnicas de la ASUS ROG Xbox Ally X

• Modelo: ROG Xbox Ally X (RC73XA)
• Procesador:
  • CPU: AMD Ryzen™ AI Z2 Extreme Processor 2.0 GHz (24 MB de caché, hasta 5.0 GHz, 8 núcleos, 16 hilos)
  • NPU: AMD XDNA™ NPU hasta 50 TOPS
  • GPU: AMD Radeon™ Graphics
  • Consumo operativo: 7–35 W
• Pantalla:
  • Tamaño/resolución: 7" FHD (1920 × 1080), relación 16:9, panel tipo IPS brillante
  • sRGB: 100% · Adobe: 75.35%
  • Protección: Gorilla® Glass DXC y Gorilla® Glass Victus™
  • Pantalla táctil (multitáctil de 10 puntos)
  • Tasa de refresco: 120 Hz
  • Brillo: 10 nits (mín.) – 500 nits (máx.)
  • Tecnología: AMD FreeSync™ Premium (VRR)
• Memoria:
  • 24 GB LPDDR5X-8000 en doble canal (on-board)
  • Asignación VRAM por defecto: 8 GB
• Almacenamiento: 1 TB PCIe® 4.0 NVMe™ M.2 SSD (2280)
• E/S (I/O):
  • 1 × conector combinado de audio 3,5 mm
  • 1 × USB4® con DisplayPort™ 2.1 / Power Delivery 3.0, compatible con Thunderbolt™ 4
  • 1 × USB 3.2 Gen 2 Type-C® con DisplayPort™ 2.1 / Power Delivery 3.0
  • 1 × lector microSD UHS-II (compatible con SD, SDXC y SDHC; modo UHS-I con DDR200)
• Controles y entrada:
  • Botones A, B, X, Y
  • Cruz direccional (D-pad)
  • Gatillos analógicos Hall Effect L & R (Impulse Triggers)
  • Topes (bumpers) L & R
  • Botón View, Botón Menu, Botón Biblioteca
  • Botón Command Center, Botón Xbox
  • 2 botones asignables en el agarre
  • 2 joysticks analógicos de tamaño completo
  • Haptics: HD haptics
  • Giroscopio: IMU de 6 ejes
• Audio:
  • Tecnología de cancelación de ruido con IA
  • Certificación Hi-Res (auriculares)
  • Dolby Atmos
  • Matriz de micrófonos integrada
  • Sistema de 2 altavoces con Smart Amplifier Technology
• Redes: Wi-Fi 6E (802.11ax) (triple banda) 2×2 + Bluetooth® 5.2
• Batería: 80 Wh, 4S1P, 4 celdas Li-ion
• Fuente de alimentación:
  • Adaptador CA Type-C de 65 W
  • Salida: 20 V DC, 3.25 A, 65 W
  • Entrada: 100–240 V AC, 50/60 Hz (universal)
• Peso: 715 g 
• Dimensiones: 29.0 × 12.1 × 2.75 ~ 5.09 cm (
• Precio: 899 euros.

Diseño y Conectividad

La ASUS ROG Xbox Ally X tiene importantes cambios en diseño respecto de las pasadas generaciones. Lo más llamativo son los dos salientes laterales, inspirados directamente en los mandos de las consolas Xbox, que hacen que el agarre sea mucho más cómodo que el modelo anterior. Eso sí, a costa de hacer que el dispositivo sea bastante más voluminoso y que aumente su peso hasta los 715g. Este aumento de peso desde los 678 g no es tan notable en la mano, y lo cierto es que ahora es mucho más cómoda de utilizar.

Este aumento de tamaño también deja lugar para unos botones superiores mucho más grandes, considerablemente más grandes que los del mando de una Xbox actual, por ejemplo.

En la parte delantera tenemos dos joysticks analógicos, rodeados por un aro de iluminación ARGB como en la primera generación. El pad o "cruceta" sigue en la parte izquierda, y en la derecha tenemos los típicos botones XYBA. 

Hay 5 botones más de función, uno de un tamaño más amplio para lanzar los menús de xbox y de uso general, otro con su interfaz específica, otro para armoury crate y menús asociados, otro para movernos entre programas iniciales, además del de menú contextual.

En esta zona tenemos la pantalla de 7 pulgadas, un panel IPS con resolución FullHD que se integra en un sistema de marcos bastante gruesos en los que quizás se podría haber aprovechado algo más el espacio para poner un panel más grande.

En la zona superior tenemos dos puertos USB-C, uno de ellos 3.1 (3.2 gen 2) de 10 Gbps, y otro USB4 de 40 Gbps, ambos muestran un comportamiento bastante irregular en transferencias de datos con picos a velocidad estándar, pero con bajadas prolongadas en el tiempo, pasando archivos que en PCs con puertos USB 3.1 de 10 Gbps tardaban 5 minutos, aquí hemos tenido que esperar más de media hora debido a que era muy complicado pasar de velocidades de 185 MB/s.

Este USB4 también es compatible para conectar a la ROG XG Mobile, una GPU externa basada en una RTX 5090.

 Estos puertos sirven también para carga con el adaptador incorporado de 65 W. Le siguen en esta zona superior un par de leds de estado, los botones de volumen, una salida de aire, un lector de tarjetas microSD, un puerto minijack de 3,5 mm para audio, y el botón de encendido con lector de huellas.

El borde superior se amplía hacia atrás, dejando más salidas de aire, mientras que en la parte trasera tenemos dos pequeños botones extra

ASUS sigue delegando en un pequeño soporte de cartón la posibilidad de colocar la consola en vertical en una mesa. Es una solución barata y que funciona, pero que en una consola de 899 euros debería venir integrada, quizás en una peana desplegable trasera.

Pantalla e Interfaz

Seguimos teniendo una pantalla de 7 pulgadas con resolución Full HD de 1.920 x 1.080 píxeles integrada en unos marcos bastante gruesos, similares a los de las primeras generaciones. Esta pantalla ofrece 120 Hz de frecuencia de actualización variable con AMD FreeSync, por lo que no parece que haya ninguna mejora notable en sus especificaciones.

Lo cierto es que la relación entre diagonal de 7 pulgadas y resolución FullHD es la opción más lógica en consolas de este tipo, donde el espacio es contenido y, por tanto, la potencia es limitada.

Su nivel de brillo máximo a pantalla completa es de 329 nits, una cifra algo escasa si queremos jugar a plena luz del día. ASUS promete 500 nits de brillo máximo, pero posiblemente estemos hablando de cifras puntuales en pequeñas zonas de la pantalla. Desgraciadamente, no tiene soporte para HDR.

A nivel de interfaz, tenemos básicamente dos modos, un modo de escritorio, con el que podemos utilizar la ASUS ROG Xbox Ally X como una suerte de mini PC, con acceso completo a Windows 11 y a sus sistema de menús; y la más interesante interfaz Xbox pensada para este tipo de dispositivos. Incluso desde la instalación inicial de Windows, el menú se ha adaptado para la consola.

También se incluye el armoury crate de Asus, con controles avanzados sobre los modos de energía, RSR y demás, se accede desde el botón dedicado, o también desde el botón de Xbox, moviendo el menú hacia la izquierda.

El modo escritorio es, tal cual, un pequeño ordenador con Windows 11.

Además, si queremos pasar al modo de pantalla completa de Xbox, nos pedirá reiniciar para poder obtener el "rendimiento optimizado". Esto puede ser un problema si queremos cambiar de modos habitualmente, aunque para su uso como consola, posiblemente estaremos siempre en el modo de Xbox.

Dentro de la interfaz de Xbox, tenemos un sistema que identifica qué juegos han sido probados en la consola y funcionan correctamente. Es una iniciativa similar a la que tiene Steam con su Deck. Aun así, esto no debe llevar a engaño, la ASUS ROG Xbox Ally X puede ejecutar juegos de PC, no juegos específicos para Xbox, aunque hoy en día, la línea que separa ambos es muy difusa y se tiende hacia la unificación.

La interfaz es sencilla de utilizar tanto con el panel táctil como con los mandos. Además, también reconoce las distintas plataformas como Steam o Ubisoft, y nos permite lanzarlas directamente, incluso el modo Big Picture de Steam.

 

Autonomía

La autonomía es un punto crítico de cualquier consola portátil. De nada sirve tener el mejor rendimiento si no podemos jugar más de media hora a nuestro juego favorito.

El AMD Ryzen AI Z2 Extreme es un SoC que introduce la arquitectura Zen 5 en la CPU junto con RDNA 3.5 para la parte gráfica, y con el que se prometen rendimiento de hasta el 30% a máxima potencia en modo turbo.

El modo turbo tiene un TDP de 35W, que equivale a un consumo parecido, al que hay que sumar elementos como pantalla y demás componentes. Si tenemos una batería de 80 Wh, en este modo sería complicado alcanzar las 2 horas de uso. Pero es que, además, la propia ASUS nos limita a 25W si no estamos conectados a la corriente. 

Por tanto, en el modo rendimiento la autonomía rondaría las 2 horas y media teóricas. En nuestras pruebas hemos conseguido 2 horas y 18 minutos con el brillo por defecto. En modo rendimiento ya bajamos a 17W, y en modo Silencio nos quedamos en 13 W, una cifra con la que la autonomía se multiplicaría al doble. En modo Rendimiento, con sus 17 W, hemos conseguido quedarnos a las puertas de las 3 horas. Por tanto, tenemos una autonomía muy similar, o incluso peor en ciertos casos, a la de la ROG Ally X de primera generación si exprimimos al máximo, pero hay que tener en cuenta, que el rendimiento es mucho mayor en estos modos de ahorro que el que ofrecía la primera generación.

Aquí depende mucho del juego, estos datos son con juegos exigentes como Cyberpunk, si jugamos, por ejemplo, al rocket leage ( un juego mucho menos exigente que se mueve de maravilla en nativo en esta consola) podemos superar sin problemas las 4 horas de uso.

No obstante, La ventaja del AMD Ryzen AI Z2 Extreme, más que su extra de rendimiento en modo turbo, es la eficiencia que consigue y con la que puede alcanzar o superar, en modo Silencio y Rendimiento en batería, al rendimiento del Z1 Extreme en modo turbo conectado.

Está claro que depende de las necesidades de cada uno, e incluso del momento, no es lo mismo querer jugar al último juego AAA con unos requisitos de hardware elevados, que a un juego casual o con años a sus espaldas, y tampoco echar una partida rápida es lo mismo que enfrascarse en largas sesiones multijugador.

Teniendo en cuenta las opciones de reescalado del FSR y RSR, si utilizamos el modo silencio podremos conseguir mucha más autonomía, reservando el modo turbo para momentos especiales.

 

Rendimiento - Benchmarks

Lo cierto es que en rendimiento puro de CPU no hay mejora real en test de CPU, de hecho, en modo Turbo y conectada a la corriente tenemos un rendimiento inferior al del Z1 Extreme en algunos casos, unos resultados algo decepcionantes. 

La GPU es otro cantar, y la Radeon 890M que ya habíamos visto en procesadores de portátiles, ofrece un extra de rendimiento, más notable en títulos que dependan más de GPU que otros que deleguen más en CPU.

Donde sí que vemos mucha mejora es en los modos de ahorro, por ejemplo, el modo Rendimiento en batería, con un TDP de 17 W, consigue superar sin problemas a los modos de batería de la anterior generación, e iguala y supera en muchos casos al modo Turbo conectado a la corriente.

Eso es un aspecto clave en una consola donde la autonomía es tan importante, ya que podemos conseguir mucho más rendimiento consumiendo realmente poco.

Está claro que este hardware no es para jugar al máximo de detalle, con raytracing activado, a los últimos juegos. Sin embargo, si combinamos con FSR, hay muchos títulos que podemos jugar de manera más que fluida con un nivel de detalle de calidad.

Al ser una pantalla pequeña, no es tan importante el uso de ciertas tecnologías de filtrado o mejora, y las diferencias de calidad no son tan apreciables entre los modos medios y altos o ultra. En cualquier caso, a poco que ajustemos los juegos, es posible obtener una experiencia muy satisfactoria en esta consola.

A nivel de temperaturas, tenemos máximas bastante contenidas en la pantalla, con puntos máximos por debajo de los 40º C.

 Test de Rendimiento CPU MultiNúcleo

Cinebench 2024 MP

 

GeekBench 6 Multi Core

Test de Rendimiento CPU 1-Núcleo

Cinebench 2024 SP

GeekBench 6 Single Core

Benchmarks Sintéticos GPU

 

3DMark Steel Nomad - Vulkan

3DMark Steel Nomad Light - Vulkan 

3DMark Solar Bay - Raytracing 

3DMark Speed Way - DX12 Ultimate

3DMark Port Royal - RayTracing

3DMark TimeSpy DX12

3DMark FireStrike Extreme

 

Reescalado FSR

3DMARK - AMD FSR 2 - 4K - PERFORMANCE

 

 

Adicionalmente al modo 4K, que es el que utilizamos para comparar con otros dispositivos, hemos realizado una prueba más cercana al uso real con resolución FullHD. En esas condiciones, sin FSRT se consiguen 20,13 FPS, y con FSR 2 Performance se llegan a 46,64 FPS.

SSD

 

CrystalDiskMark SSD

Juegos Full HD

Juegos FullHD (1920 x 1080)

 

Black Myth: Wukong - 1080p - Medio - No RT+ FSR 50% FrameGen

 

F1 24 - 1080p - ULTRA - RAYTRACING MAX + FSR Equilibrado + Frame Gen

F1 24 - 1080p - ULTRA - RAYTRACING MAX

CYBERPUNK 2077 - 1080p - Modo Steam Deck + FSR 3.1 + Frame Gen

CYBERPUNK 2077 - 1080p - ULTRA - RT MAX

FAR CRY 6 - 1080p - ULTRA + RAYTRACING + FSR Rendimiento

FAR CRY 6 - 1080p - ULTRA + RAYTRACING

 

GTA V - 1080p - Medio- DX11

GTA V - 1080p - ULTRA - DX11

Análisis y Conclusión

ASUS y Microsoft han conseguido situar a su nueva ROG Xbox Ally X como el referente dentro de las consolas x86 del mercado. Con una Steam Deck que abrió el camino, pero que actualmente está muy superada en cuanto a hardware. 

La interfaz y soporte de Xbox es un detalle que mejora la experiencia de uso, aun cuando el software necesita algo más de trabajo. No obstante, es cierto que esperábamos más rendimiento de la Cpu. En global si tenemos en cuenta el conjunto con la GPU es una mejora interesante en potencia pura. Pero lo que es mucho más interesante es el salto en eficiencia, es precisamente en los modos de menor consumo donde el Z2 Extreme ofrece una mejora mucho más notable, permitiendo jugar durante más tiempo de manera fluida.

El Z2 Extreme en modo batería a 17W, consigue en juegos un rendimiento superior al Z1 Extreme en modo Turbo y conectado (35W).

Naturalmente, hay que tener en cuenta que se trata de un SoC muy pequeño en un dispositivo muy portátil, pero es en este tipo de consolas donde las tecnologías de reescalado tienen su sentido, pudiendo renderizar a 720p y escalar a FHD en esta pantalla de 7 pulgadas sin notar pérdidas de calidad y sí ganar un extra importante de fluidez. Esa pantalla es uno de los puntos donde esperábamos también algo de mejora, pero seguimos con unas especificaciones muy similares, por no decir idéntica.

La ROG Xbox Ally X no solo mejora en eficiencia a su predecesora. Su diseño, si bien es más voluminoso por los dos salientes para el agarre, es ahora mucho más cómodo, con botones traseros más grandes, y una interfaz mucho más adaptada a lo que una consola portátil debería ser. No obstante, no consideramos que sea un salto generacional relevante, más bien es una evolución de la ROG Ally X, ahora con más apoyo de Microsoft, pero un hardware que, en muchos casos, permanece sin demasiadas mejoras de rendimiento.

En cualquier caso, esta ROG Xbox Ally X supera sin duda a su predecesora, quizás no con un margen tan amplio como esperábamos, pero no hay duda de que es la mejor consola portátil que podemos adquirir en la actualidad.

El precio se mantiene en 899 euros para esta versión tope de gama, el mismo que tenía la ROG Ally X de pasada generación, por lo que tenemos más prestaciones, más comodidad y más tecnología al mismo precio, haciendo que la ASUS Xbox ROG Ally X sea una de las mejores opciones para los que buscan una consola portátil con todo el catálogo de juegos para Windows.

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