La última actualización de Counter Strike: Global Offensive ha introducido un nuevo sistema anticheat, que, si bien ya era muy necesario teniendo en cuenta el actual estado del juego, parece ser que no está funcionando todo lo bien que debería, llevándonos a recordar a Vanguard, el intrusivo anticheat de Riot Games que provocó una buena lista de problemas a los jugadores de Valorant.
El nuevo Trusted Mode de Counter Strike bloquea cualquier interacción de un proceso con el juego, requiriendo a los jugadores que cierren el programa que esté causando problemas y reiniciar el juego antes de permitirles el acceso, o, por otro lado, iniciar el juego con la flag -untrusted, algo que impide el acceso a servidores con VAC, entre ellos los competitivos.
Como era de esperar, programas que no suponen ningún peligro como Discord, OBS, Spotify, o NVIDIA Game Filter están provocando que el juego se niegue a funcionar, algo que empeora por el hecho de que Valve ha decidido no trasladar a los usuarios cual es el programa que está haciendo saltar la protección, obligando a cerrar programas de uno en uno y reiniciar el juego cada vez para conseguir saber cual es el problema.
Valve no se ha pronunciado aún al respecto, pero debería hacerlo pronto.
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