Parece ser que un bug en el sistema de actualizaciones de Windows está haciendo que usuarios con equipos que no soportan el nuevo sistema operativo de Microsoft estén viendo como se les ofrece una actualización a Windows 11. Sin embargo, esto parece ser un bug, e incluso si aceptamos la actualización, no se llegará a instalar debido a los chequeos que existen.
Esto no parece ser nada intencional, pues Microsoft no ha modificado los requisitos de sistema de Windows 11 pese a la gran cantidad de críticas que recibió, especialmente ante el requisito de TPM 2.0, el cual muy pocos equipos tienen, y los que lo tienen es casi por casualidad, al formar parte de la plataforma en la que se encuentran.
Según leemos en Windows Central, una de las usuarias afectadas por este bug cuenta con un equipo escolar que a duras penas puede ejecutar Windows 10, y cierto es que con 2GB de memoria RAM DDR3 y un procesador antiguo a 1.12GHz, es complicado imaginar que cualquier sistema operativo pesado pueda funcionar correctamente.
Sea como fuere, es de esperar que Microsoft solucione este problema pronto, pues puede ser que se haya reutilizado la misma herramienta que hizo que millones de usuarios vieran como sus equipos se actualizaban forzosamente a Windows 10, sin importar lo que ocurriese después.
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